Numerosas llamadas a la convivencia y a la paz social en el mensaje de Navidad que el rey Felipe VI ha pronunciado esta nochebuena de 2018.
El tradicional mensaje de Navidad del Rey, con una duración total de 10 minutos y 50 segundos, hace hincapié este año en la necesidad de proteger y velar por la «convivencia» que tanto esfuerzo ha costado a generaciones de españoles que, ahora, deben asegurar, señala el monarca, un futuro en paz para los más jóvenes.
El mensaje de este año, grabado en el Salón de Audiencias del Palacio de La Zarzuela y ‘adornado’ con banderas de España y de la Unión Europea , con un Misterio con el nacimiento del Niño Jesús, la Virgen María y San José y una fotografía de la lectura de la Constitución Española del Rey y la Princesa de Asturias, parece apostar por un tono menos firme que el de años anteriores, cuando el monarca lanzó mensajes directos al entorno del separatismo:
Lea aquí el mensaje del Rey
«Permitidme -señala el Rey- que esta noche os hable de algo que también me parece muy importante. Quiero hablaros de nuestra convivencia, de los principios en los que se inspira, pensando en el presente y también en el futuro, en nuestra generaciones más jóvenes, a las que me voy a dirigir hoy especialmente».
En ese mensaje a los jóvenes, Felipe VI recuerda que los ideales que animaron y unieron a los españoles durante la transición son el fundamento y la base de la libertad y del progreso los últimos cuarenta años: «la reconciliación y la concordia; el diálogo y el entendimiento; la integración y la solidaridad».
Así, sin una mención directa a lo ocurrido, por ejemplo, el pasado viernes en Cataluña, el Rey llama a hacer «todo lo que esté en nuestras manos» para «que esos principios no se pierdan ni se olviden, para que las reglas de todos sean respetadas por todos».
En el último párrafo de su mensaje, Felipe VI recuerda que esa convivencia «exige el respeto a la Constitución» de la que dice «no es una realidad inerte, sno una realidad viva que ampara, protege y tutela nuestros derechos y libertades».
