El secretario general de Junts, Jordi Turull, ha confirmado que el partido boicoteará el pleno si se produce la detención de Carles Puigdemont, que fugó de España en 2017 para evitar ser juzgado por el golpe separatista.
«Él quiere asistir al pleno, es un compromiso que tiene», ha manifestado Turull en una entrevista en TV3, antes de señalar que no tiene nada pactado con los Mossos acerca de su regreso y que su presencia en el escaño será «una victoria del independentismo».
Si es arrestado de camino al Parlament, Junts pedirá que el pleno no se celebre, porque «sus derechos políticos se verán anulados» como diputado. Si el pleno se celebra, los diputados de Junts no irán.
Desde ERC han manifestado que de producirse la detención mantendrían sus compromisos de investidura con el PSC, aunque ha reconocido que podría retrasarse la sesión en el Parlament: «Es evidente que es un escenario que hay que contemplar».
La portavoz de ERC, Raquel Sans, ha defendido el «sí vigilante» del acuerdo con PSC y ha avisado que la legislatura en Cataluña «dependerá de los cumplimientos». «Somos gente de palabra, si se cumplen los acuerdos, no tiene que ser una legislatura inestable», ha indicado. Por ello, ha agregado que la recaudación en su totalidad del IRPF en 2026 «será una fecha determinante para saber si el cumplimiento de los acuerdos va hacia adelante o no».
