La ANC fue la entidad que organizó las principales movilizaciones secesionistas para impulsar el referéndum ilegal del 1-O. Ahora la caído en el pesimismo y constata que «la mayoría de la población no ve la independencia adquirible a corto plazo».
Así lo reconoce la organización presidida por Lluís Llach en el documento en el que detalla su estrategia para los años 2025 y 2026. «Nuestra nación se desnacionaliza de forma acelerada», ha señalado la ANC.
«Los fracasos, los engaños y las renuncias reiteradas de los partidos (…) han acabado erosionando gravemente su credibilidad y el proyecto que representaban», critica la entidad para explicar la abstención con la que el electorado separatista castigó a los promotores de golpe en la últimas elecciones catalanas.
La ANC subraya que, «por primera vez desde el inicio del proceso, el movimiento no cuenta con mayoría parlamentaria». Hace dos meses, ya pidió a sus socios y simpatizantes «reactivar» la sectorial de Trabajadores por la Independencia. «Vuelve a ser necesario saber trabajar juntos para transmitir a los trabajadores catalanes los beneficios de la independencia y de la República Catalana», añadió en una carta del secretario nacional de la ANC Albert-Jordi Vendrell.
