La muerte de los dos militares españoles fallecidos el jueves en unas maniobras llevadas a cabo en un lago de la base de la Brigada ‘Guzmán el Bueno’ X en Cerro Muriano (Córdoba), a los que ha identificado como el cabo Miguel Ángel Jiménez Andújar y el soldado Carlos León Rico, pudo deberse a una negligencia del mando.
En un mensaje publicado a través de su cuenta de la red social X (Twitter), el Ejército de Tierra ha especificado que el cabo Jiménez, destinado en el Regimiento de Infantería ‘La Reina’ 2, había participado en misiones en Letonia y Líbano y se encontraba en posesión de dos cruces al mérito militar con distintivo blanco. Por su parte, el soldado Carlos León Rico ingresó como soldado en el Ejército de Tierra en mayo, también destinado al citado regimiento. Al parecer, el capitán ordenó a los soldados entrar en un lago lleno de barro con chaleco y mochila y a primera hora de la mañana, con poca visibilidad.
El primero de los cuerpos fue hallado pasadas las 15.00 horas del jueves y el segundo cuerpo antes de las 17.00 horas. En la zona también tuvieron que ser asistidos otros militares por síntomas de hipotermia. Además, algunos habrían informado antes de empezar el ejercicio de que no sabían nadar. Según ha informado la BRI X en una nota, dicha medida contra el citado oficial del Regimiento, que ha sido apartado, se adopta, «sin perjuicio del resultado de la investigación judicial que se está llevando a cabo», en este caso por parte del Juzgado de Instrucción número cuatro de Córdoba, y mientras se espera el resultado de la autopsia que se le practicará a los militares fallecidos.
