La presidenta en funciones del Parlament, Alba Vergés, ha amenazado al presidente del grupo parlamentario VOX, Ignacio Garriga, con censurarle y retirarle la palabra por denunciar el escenario de inseguridad que sufren los catalanes como consecuencia de la política de puertas abiertas con la inmigración ilegal.
«Este es el claro ejemplo de democracia que tienen, silenciar al disidente y silenciar la realidad que sufren los catalanes en las calles. Dejen hablar de democracia, ustedes son el totalitarismo golpista con patas que preside las instituciones en Cataluña», ha dicho Garriga tras las amenazas de Vergés.
En su intervención en el Debate de Política General (DPG) celebrado este martes en el Parlament, en medio de la crisis interna y del fuego cruzado entre ERC y Junts, Garriga ha hecho hincapié en la degradación de la vida cotidiana de los catalanes por la política inmigratoria del Gobierno de Peré Aragonés. Los catalanes, especialmente los más humildes, sufren día tras días robos con violencia, okupaciones [la región suma el 42% de las que se registran en el conjunto de España] y violaciones, que se han duplicado en los últimos seis años.
«Ha condenado a nuestra tierra a encabezar las listas de delincuencia y este hecho no es producto de la casualidad, allí donde más se promueve y se alienta el efecto llamada (…) siempre crecen los abusos sexuales, la violencia callejera y los asesinatos«, ha dicho Garriga. «Las violaciones en manada, los atracos y las peleas callejeras perpetrados por inmigrantes ilegales no son casos aislados», ha añadido.
En este escenario, ha incidido en el «fallido experimento multicultural» que ha provocado que más del 80% de los presos en las cárceles de jóvenes son extranjeros y que casi el 90% de los detenidos por hurto en la vía pública en julio de 2022 son extranjeros, según datos de la consejería de Justicia. «Ante este panorama… todos ustedes han declinado nuestra petición de convocar un pleno monográfico sobre seguridad».
‘Los catalanes viven peor que hace 500 días’
«Cataluña es hoy es la imagen del fracaso de las políticas del separatismo. Los catalanes viven peor que hace 500 días«, ha agregado Garriga, que ha reiterado que la región lleva más de una década «inmersa en un proceso de destrucción interno» que ha provocado la «parálisis total» y que ha contado con la colaboración de los distintos gobiernos del PSOE y del PP, que «han entregado competencias y han rendido derechos».
Así, ha denunciado el caos y la ineficacia del Gobierno de la Generalitat, «enfrascado en peleas diarias y luchas de poder», y con el socialista Salvador Illa, al que ha llamado «consejero en la oposición» y «socorrista del separatismo», como «muleta indispensable». «Pasan semanas y no toman ninguna medida real», ha añadido Garriga, que ha incidido en el infierno fiscal que sufren los catalanes «para mantener sus gastos políticos en lugar de mejorar unos servicios públicos deficientes» y la incertidumbre social y económica que provoca colas del hambre y que ha situado a Cataluña en las peores listas de paro, exclusión social y pobreza» de España.
