Pancartas pidiendo la libertad de Junqueras en el edificio de la Vicepresidencia de la Generalitat, controlada hoy por Soraya Sáez de Santamaría.
El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, y la vicepresidenta Soraya Sáez de Santamaría han dado por acabado el proceso independentista en Cataluña tras los comicios del pasado 21 de diciembre, creen que la «normalidad» ha llegado a Cataluña una vez aplicado el artículo 155 y aseguran que «las cosas van mejor» desde que se intervino la Generalitat.
¿Normalidad? El Ejecutivo considera normal, por ejemplo, que el Departamento de la Vicepresidencia -que todavía controla- haya colgado, según cuenta Dolça Cataluña, una pancarta pidiendo la «liberación de los presos políticos». La misma línea ha seguido el Ayuntamiento de Barcelona, que ha puesto un lazo amarillo en su fachada para reclamar la libertad de los políticos presos Oriol Junqueras, Joaquim Forn, Jordi Sànchez y Jordi Cuixart y en apoyo a sus amigos y familiares.
En una nota, el Consistorio ha informado de que con este gesto «quiere expresar su rechazo a la decisión de mantener en prisión preventiva a cargos electos y representantes de dos de las entidades más importantes del país que siempre han actuado de manera pacífica». Desde que fueron encarcelados, el Ayuntamiento de Barcelona «ha exigido su puesta en libertad en múltiples ocasiones», ha recordado.
El pasado 17 de octubre los grupos Barcelona en Común, Grup Municipal Demòcrata, ERC, CUP y el concejal no adscrito Gerard Ardanuy acordaron llevar a cabo acciones de protesta por los encarcelamientos, como la suspensión de la actividad institucional los días 17 y 18 de octubre. Otras de las acciones que se llevaron a cabo fue el 2 de noviembre, cuando se desplegó una pancarta en la fachada del ayuntamiento reclamando su libertad y que la Junta Electoral ordenó retirar con motivo de la pasada campaña electoral
La «normalidad» no queda aquí. En Cabrils (Barcelona) el delirio ha rebasado la barrera de la petición de libertad de los golpistas y los separatistas -según han demostrado en una exposición municipal de belenes- aseguran que el Niño Jesús nació en una «tupper-urna» de miniatura utilizada en el referéndum ilegal del pasado 1 de octubre.
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