Jordi Évole lanzó este domingo un programa denominado ‘Stanger Pics’ en el que cargaba contra la industria cárnica en general y la empresa El Pozo en particular.
El Pozo ha querido salir al paso de las «difamaciones» de Évole y han asegurado que los animales que aparecen en su reportaje «jamás entrarían en la cadena de producción de ElPozo Alimentación» dado que «los controles estipulados por la legislación española y por la propia empresa hacen inviable esta posibilidad».
«Los veterinarios oficiales de la Administraciones realizan su labor, así como en todas las industrias cárnicas, y velan por el cumplimiento riguroso de las normas de seguridad alimentaria», han subrayado.
Es imposible que animales como los mostrados en el programa Salvados entren en nuestra cadena de producción. Aquí nuestro comunicado ➡ https://t.co/lwCzTkTY93 pic.twitter.com/VqWcfqGF42
— ElPozo Alimentación (@ElPozoAlimenta) 4 de febrero de 2018
Desde El Pozo han argumentado que Évole escogió para la grabación un sector que se conoce como lazareto o área de recuperación sanitaria. Se trata de animales que tienen algún tipo de malformación o enfermedad de nacimiento que «deben vigilarse para ver su evolución y saber si ha llegado el momento de sacrificarlos».
«Aquellos animales que finalmente no llegan a recuperarse son sacrificados sanitariamente por veterinarios autorizados, en la propia granja, conforme a la legislación vigente de bienestar animal (…) y son retirados por gestores autorizados oficialmente por la Administración», ha añadido el grupo cárnico, que ha recordado que disponen «de toda la documentación ofical que acredita este cumpliento legislativo».
«El grupo cuenta con más de una veintena de certificados nacionales e internacionales que acreditan su estricto cumplimiento de todas las exigencias en materia de sanidad, seguridad alimentaria y bienestar animal», han asegurado.
