Explica que una parte del Govern se ha desplazado a Bruselas «para hacer evidente el problema catalán en el corazón de Europa» y que «otra seguirá en Cataluña realizando la actividad política como miembros legítimos».
El expresidente de Cataluña, Carles Puigdemont, se ha presentado este jueves en Bruselas como “presidente del gobierno legítimo de Cataluña” y ha explicado que no va a pedir asilo a Bélgica, sino que su viaje y el de cinco consejeros a Bélgica responde a una estrategia adoptada el viernes por la noche ante la previsión de una “ofensiva altamente agresiva” del Gobierno contra los impulsores de la declaración de independencia.
La comparecencia ha tenido lugar en el club de la prensa de Bruselas, después de que el gobierno belga le haya negado una sala. Puigdemont ha estado acompañado de varios de sus exconsejeros.
El expresident ha informado de que parte del Govern se ha desplazado a Bruselas para «hacer evidente el problema catalán en el corazón de Europa» y que «otra parte del Govern seguirá en Cataluña realizando la actividad política como miembros legítimos».
«Nunca abandonaremos el Gobierno», ha advertido Puigdemont, y ha vendido que el gobierno «legítimo” de la Generalitat sigue trabajando en una línea de “prudencia” para evitar la confrontación. Además, ha llamado a las entidades civiles a resistir “contra la aplicación del artículo 155” y la “desmantelación de las instituciones catalanas”.
No volverá a España
El expresident catalán no pide asilo al conocer la negativa de Bélgica, pero ha advertido de que no volverá a España «por seguridad» «hasta tener garantías».
Por otra parte, ha afirmado que se toman las elecciones del próximo 21 de diciembre como un reto democrático, y ha retado al Gobierno a “aceptar” los resultados que salgan de las urnas. “Vamos a afrontar las elecciones como un reto democrático. No nos dan miedo. Si el Estado ha querido hacer un plebiscito para apoyar el 155 y sus medidas, vamos a aceptarlo. Votando es como se resuelven los problemas”, ha manifestado Puigdemont.
Antes de esta comparecencia, cerca de las 11:00 horas, Puigdemont ha estado en la sede de la Alianza Libre Europea, la agrupación de partidos nacionalistas e independentistas europeos.
Puigdemont se ha refugiado en Bruselas (Bélgica) este lunes. Se desplazó en vehículo hasta Marsella y allí tomo un vuelo hasta la capital belga. Ha contratado como «asesor legal» al abogado al abogado belga Paul Bekaert que ha defendido a varios etarras detenidos en Bélgica para evitar su extradición a España.
Ha viajado hasta allí con cinco de sus exconsejeros, justo el día en el que la Fiscalía se ha querellado contra los exmiembros del Govern por rebelión, sedición y malversación por la organización del referéndum ilegal del 1-O y la declaración unilateral de independencia.
La Comisión Europea no ha mantenido contactos con el expresidente de la Generalitat, según ha indicado este martes la portavoz Mina Andreeva durante la rueda de prensa diaria del Ejecutivo comunitario.
El propio Paul Bakeart ha confirmado, en declaraciones a la cadena flamenca VRT, que ha «hablado personalmente con él» en Bélgica y que defenderá «sus intereses».
Al mismo tiempo que se celebraba esta rueda de prensa, el Tribunal Supremo ha citado a declarar este jueves a la presidenta del Parlament, Carme Forcadell, y a los otros cinco miembros de la Mesa.
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