El Tribunal Supremo de Estados Unidos ha decidido admitir a trámite la petición de inmunidad presidencial del expresidente Donald Trump en el caso penal federal que le acusa de acciones delictivas el 6 de enero de 2021, día del célebre asalto al Capitolio.
La defensa de la inmunidad presidencial ha paralizado el caso durante casi tres meses, con lo que no se celebrará el juicio previsto originalmente para el 4 de marzo. La decisión del alto tribunal impide automáticamente que los tribunales inferiores se ocupen del caso, dando un respiro al más que probable candidato republicano.
El Supremo también aceptó la solicitud del fiscal especial Jack Smith de que la petición de suspensión del presidente Trump se tratara como una petición de revisión. «El caso será fijado para alegato oral durante la semana del 22 de abril», dice la orden.
Se ha ordenado a las partes que limiten sus argumentos a la siguiente pregunta: «Si, y en caso afirmativo, en qué medida un expresidente disfruta de inmunidad presidencial frente a un proceso penal por conductas que presuntamente involucran actos oficiales durante su mandato».
Los fiscales argumentan que los presidentes no disfrutan de inmunidad frente a procesos penales, mientras que los abogados defensores sostienen que los actos oficiales de un presidente durante su mandato están protegidos por la inmunidad presidencial.
El año pasado, el presidente Trump presentó originalmente una moción para desestimar el caso basándose en la inmunidad presidencial. Cuando la juez del Tribunal de Distrito de Estados Unidos, Tanya Chutkan, rechazó la moción en diciembre, la defensa llevó el caso a un tribunal de apelaciones, dejando el calendario previo al juicio en el limbo.
Un panel de un tribunal federal de apelaciones rechazó esta defensa el 6 de febrero y, en una orden atípica, retuvo su mandato con la condición de que el presidente Trump llevara su caso a la Corte Suprema antes del 12 de febrero.
El Supremo determinó que, «sin pronunciarse sobre el fondo, este Tribunal ordena al Tribunal de Apelación que continúe suspendiendo la emisión del mandato hasta que se dicte sentencia de este Tribunal», se lee en la nueva orden.
Los escritos del presidente Trump deben presentarse antes del 19 de marzo, y los fiscales tienen hasta el 8 de abril para responder. Luego, el presidente Trump podrá presentar un escrito de respuesta antes del 15 de abril y los argumentos se escucharán la semana del 22 de abril. No se fijó una fecha específica para la audiencia. Este es el segundo caso que el presidente Trump lleva ante la Corte Suprema este año.