La Corte Suprema de Estados Unidos ha dado luz verde este miércoles a un plan impulsado en agosto por el gobernador de Virginia, el republicano Glenn Youngkin, para que no puedan votar más de 1.600 individuos que no son ciudadanos estadounidenses.
La decisión, aprobada con una mayoría de los jueces conservadores, bloquea el fallo de un juez federal anterior que suspendió la iniciativa diseñada por Virginia.
«Los habitantes de Virginia podrán votar el día de las elecciones sabiendo que los comicios son justos, seguros y libres de interferencias por motivaciones políticas», ha indicado este miércoles en un comunicado el gobernador republicano, Glenn Youngkin.
El expresidente estadounidense Donald Trump recordó que los votantes no registrados —aquellos que no cuentan con la ciudadanía— no tienen derecho al voto y que alteraron los resultados de las elecciones de 2020.