El Papa emérito sigue «grave» pero «la situación en este momento es estable», según ha señalado el director de la Oficina de Prensa de la Santa Sede, Matteo Bruni.
«Aunque su estado sigue siendo grave, la situación en este momento es estable», ha señalado en el primer parte médico del día después de que sus condiciones de salud se deterioraran drásticamente en las últimas horas.
«El Papa emérito consiguió descansar bien anoche, está absolutamente lúcido y alerta hoy«, ha añadido Bruni. Del mismo modo, Franciso ha renovado «su invitación a rezar por él y a acompañarle en estas horas difíciles».
El National Catholic Register ha informado este jueves de que el Papa emérito ha estado experimentando «insuficiencia renal que se ha agravado en las últimas horas». La fuente de este medio que sigue la información vaticana agregó que Benedicto, de 95 años, tuvo una modificación en su «marcapasos hace aproximadamente un mes y medio para regularizar los latidos de su corazón», pero subrayó que no tenía relación con sus riñones.
Benedicto XVI se encuentra en el monasterio Mater Ecclesiae, situado dentro de los muros del Vaticano, donde reside desde que renunció al pontificado en 2013 y de momento no ha sido traslado a ningún hospital aunque la atención médica que recibe es constante.
