El primer ministro del Reino Unido, Keir Starmer, ha desplegado un plan para revitalizar el crecimiento económico del país, apostando recientemente por la energía nuclear. La ministra de Economía, Rachel Reeves, ha anunciado una inversión pública de 11.500 millones de libras esterlinas (unos 13.600 millones de euros) para el proyecto de la central nuclear Sizewell C, situada en la localidad de Suffolk.
Reeves ha decidido modificar las reglas de equilibrio fiscal que limitan el aumento de la deuda pública, con el fin de destinar esa importante cantidad a la industria nuclear, al igual que ha anunciado un incremento de la inversión en defensa hasta el 2,5% del PIB en los próximos dos años. En este contexto, ha explicado que «la seguridad no se reduce solo a nuestras fuerzas armadas, sino que también implica evitar que los precios de la energía se disparen debido a eventos internacionales o a la fragilidad de las cadenas de suministro globales».
El Gobierno de Starmer ha señalado que esta inversión fomentará la creación de empleo y el crecimiento económico. Según Reeves, el proyecto Sizewell C generará 10.000 nuevos puestos de trabajo. Sumando los 13.600 millones de euros comprometidos recientemente a los 3.100 millones anunciados hace un año y a los 4.200 millones que el Tesoro británico ha reservado para la construcción de la central en los últimos dos años, la inversión pública total supera los 20.000 millones de euros para esta nueva planta.
