El Parlamento Europeo ha aprobado una resolución cuyo propósito estriba en eliminar las vías de financiación de que se nutre la yihad global
A propuesta de Ciudadanos, el Parlamento Europeo ha aprobado una resolución cuyo propósito estriba en eliminar las vías de financiación de que se nutre el terrorismo islámico; esto es, en bloquear el dinero procedente tanto de actividades ligadas al crimen organizado o al petróleo como de eso que el eurodiputado de C´s Javier Nart denomina ‘transferencias sutiles’ (las que proceden de entidades tales como las oenegés o de tarjetas de débito prepagadas).
Lo cierto es que la resolución ratificada por el Europarlamento está trufada de una inédita valentía, pues se refiere a realidades que, tras años de opresión políticamente correcta, se habían tornado en tabú. De esta manera, se centra también en las mezquitas ‘sospechosas’ y en aquellas oenegés que se utilizan como tapaderas para canalizar recursos destinados a matar o a difundir propaganda que incita a hacerlo.
Precisamente sobre esto último se ha pronunciado Javier Nart en declaraciones a ABC. Así, ha tratado de desprender a las oenegés de esa aura de pureza que las envuelve: ‘Una ONG en sí misma es una organización respetable, pero ser una ONG no te purifica como entrar en el río Jordán’ – advierte – ‘Las ONG tienen la correctísima fama que se merecen, pero pueden ser una perfecta cobertura; por eso hemos tenido en cuenta lo que todos sabemos que existe: hay instituciones caritativas que vehiculan dinero de dos maneras, unas veces con iLa UE vigilará a ONG´s y mezquitas ‘sospechosas’ de financiar la yihadmprudencia (no querer saber o no investigar demasiado dónde va ese dinero) y otras con malicia. Y después, lo que encontramos son determinadas personas que con la mano izquierda fornican, beben y juegan -conceptos antiislámicos- y con la derecha limpian su alma putrefacta a través de donaciones que sirvan para luchar contra lo que ellos creen que es el Islam apóstata’.
Como vemos, Nart se libera de las cadenas de la corrección política – a la que moteja de ‘forma de castración mental’ – para esgrimir argumentos casi incompatibles con los dogmas del progresismo global. De este modo, se pregunta: ‘¿Por qué las transferencias de un paquistaní en Europa pueden ser opacas y las mías no? Tenemos los mismos derechos y obligaciones, y en este lugar (la UE) se actuará de acuerdo a las normas que hay para todos’.
Un verdadero milagro
Resulta en cierto modo milagroso que el documento ideado por Nart haya salido adelante, pues, como ya hemos señalado, está repleto de sintagmas incómodos para el sistema. La resolución, de hecho, fue secundada por la abrumadora mayoría del Parlamento Europeo: 533 de los 600 votos emitidos en total. Apercibida de esto, la Comisión legislará en los próximos meses respecto a esta controvertida cuestión.
El eurodiputado del partido centrista se ha referido precisamente a esta desconcertante mayoría: ‘Cuando dije en noviembre al comisario de Seguridad, Julian King, que iba a buscar acuerdos para proponer cómo cortar las vías de financiación del yihadismo, me deseó todo género de éxitos desde el más profundo escepticismo’, ha señalado Nart, quien ha elogiado también a aquellos partidos que, sin estar absolutamente de acuerdo con el texto, lo han apoyado por cierto sentido del deber.
La aprobación de esta resolución en el Parlamento Europeo ha llevado a muchos comentaristas y tuiteros a preguntarse por qué no se había legislado antes sobre esta materia. Así, no comprenden que las oenegés y las mezquitas ‘sospechosas’ no sean exhaustivamente controladas – a día de hoy – por una organización comunitaria que quizá esté demasiado centrada en temas accesorios, de exigua importancia para los europeos.