El diario «Le Monde» precisa que se investigó, en particular, su relación con otro delincuente de mayor envergadura originario del mismo barrio de Carcasona (sur de Francia), Malik M., supuestamente implicado en tráfico de armas.
El presidente francés, Emmanuel Macron, anunció que se va a convocar a los grupos encargados del seguimiento de personas sospechosas de radicalización terrorista, después de que no se detectara que el autor del atentado yihadista del viernes, con cuatro muertos, podía pasar a la acción.
En un comunicado emitido al término de un consejo restringido de defensa consagrado a los ataques protagonizados por Radouane Ladkim, el Elíseo explicó que Macron pidió a los prefectos (delegados del Gobierno) que convoquen en cada departamento a los grupos de evaluación de los individuos señalados por radicalización.
Macron insistió en que la investigación, que moviliza a cientos de expertos, «debe aclarar los eventuales vínculos del terrorista con Dáesh (acrónimo en árabe del grupo yihadista Estado Islámico), que reivindicó el atentado» ocurrido en el sur de Francia.
También ha de determinar si hubo cómplices que le pudieron ayudar para llevar a cabo los ataques y las «etapas» de su radicalización.
El Ministro del Interior, Gérard Collomb, y el fiscal de París, François Molins, responsable de la investigación, reconocieron ayer que Ladkim, con antecedentes por delitos comunes (llegó a cumplir una condena de cárcel), había sido objeto de vigilancia, primero en 2014 y luego en 2016 y 2017.
Pero los servicios secretos no detectaron señales que les pudiera hacer sospechar que Ladkim, quien terminó siendo abatido por las fuerzas del orden, iba a cometer una acción terrorista, indicó el fiscal.
El diario «Le Monde» precisa que se investigó, en particular, su relación con otro delincuente de mayor envergadura originario del mismo barrio de Carcasona (sur de Francia), Malik M., supuestamente implicado en tráfico de armas.
En Francia hay cerca de 20.000 personas en el fichero de potenciales radicales terroristas, una cifra imposible de manejar por los servicios secretos que hacen una criba y en la práctica sólo tienen en cuenta alrededor de 11.000, los que consideran más sensibles.
En su periplo criminal ayer en Carcasona y Trèbes, el terrorista hirió a una quincena de personas y asesinó a cuatro, la última un teniente coronel de la Gendarmería que se había intercambiado voluntariamente por una mujeEl gran fracaso de Macron: el plan antiterrorista francés hace aguasr que Lakdim mantenía como rehén en el supermercado donde se había pertrechado.
Arnaud Beltrame, considerado un «héroe» por Macron por haber dado su vida por «proteger a nuestros ciudadanos», tendrá un «homenaje nacional», anunció el Elíseo.