El Gobierno italiano ha anunciado que se adhiere a la suspensión de los procedimientos de aquellas solicitudes de asilo presentadas por ciudadanos sirios tras la caída del régimen del presidente de Siria, Bashar al Assad, que ha huido del país y se encuentra en Rusia. Este posicionamiento ha llegado horas después de que varios países europeos tomaran esta decisión.
En este sentido, la oficina de la primera ministra italiana, Giorgia Meloni, ha indicado que «seguirá de cerca la evolución de la situación, en estrecho contacto con los principales socios regionales, europeos y del G7″. Sin embargo, en el comunicado señala que, «en vista de que en algunas regiones de Siria aún continúan los combates, absoluta prioridad de la protección de los civiles».
Asimismo, ha hecho un «especial hincapié» en la seguridad de los ciudadanos italianos y en la protección de los cristianos y de «todas las minorías». También ha decidido mantener la presencia diplomática en Damasco y, en nombre del Gobierno, ha expresado su profunda gratitud hacia el personal de la misión diplomática.
