Miles de irlandeses se han manifestado esta tarde en el centro de Dublín para protestar contra la inmigración ilegal masiva que sufre su país en los últimos años, con consecuencias directas y visibles para la seguridad en las calles.
Los manifestantes, en buena parte familias al completo, se han reunido en el Jardín del Recuerdo a las 14.00 hora local, algunos portando banderas tricolor irlandesas, así como carteles y pancartas con lemas como «Irlanda primero».
La marcha ha partido de la plaza Parnell, —donde un inmigrante argelino apuñaló a cinco personas en noviembre, entre ellas a tres niños—, hacia el río Liffey por la calle O’Connell, con amplia presencia policial a pesar de su carácter pacífico.
En la manifestación han estado presentes miembros de del Partido Nacional y del Partido de la Libertad Irlandesa.
Contraprotestas de extrema izquierda
En paralelo, también ha tenido lugar una contraprotesta frente a la Oficina de Correos de O’Connell, en defensa de la inmigración y legal, entre otras políticas globalistas.
En ella, el diputado del partido izquierdista People Before Profit (la gente antes que los beneficios) ha exclamado que quienes afirman que están «defendiendo nuestra cultura están haciendo todo lo contrario».
