Los opositores han suscrito en Polonia una alianza que está llamada a investir como primer ministro a Donald Tusk, si bien la vuelta al poder del antiguo presidente del Consejo Europeo deberá esperar aún al virtual fracaso del actual jefe de Gobierno, Mateusz Morawiecki.
El presidente polaco, Andrezj Duda, ha encargado a Morawiecki el encargo de formar Gobierno, pese a que no tiene «a priori» posibilidad de obtener el respaldo del Parlamento tras los resultados obtenidos en las elecciones del 15 de octubre. Si fracasa, corresponderá a los diputados designar un segundo candidato, en principio Tusk.
La Coalición Cívica de Tusk, Tercera Vía y Nueva Izquierda y Polonia 2050 han formalizado este viernes el acuerdo. El ex primer ministro ha defendido que nace fruto de la «responsabilidad» y ha destacado que todo avanza «en la dirección correcta», pese a que ahora toca «esperar» por «las decisiones del presidente».
Los grupos opositores habían reclamado a Duda que obviase que Ley y Justicia, el partido de Morawiecki, había sido la formación más votada en los últimos comicios.
