La organización humanitaria Open Arms zarpó con destino hacia el Mediterráneo Central el pasado 21 de abril, desde ese día, numerosos grupos de Facebook controlados por las mafias libias se hacen eco de cada uno de los movimientos de la ONG, hasta el punto de utilizar imágenes de la organización como señuelo.
Los hechos se produjeron esta semana, cuando en uno de estos grupos en los que suelen interactuar traficantes de personas con inmigrantes deseosos de viajar ilegalmente a Europa, se publicó un anuncio en el que se ofertaban plazas en una embarcación que zarparía de forma inminente desde Libia.
En dicho grupo, conformado por casi 3.400 miembros, tuvieron lugar numerosas interacciones con la citada publicación, preguntándose en uno de los comentarios el precio del viaje ilegal ofertado. El traficante que había colocado el anuncio no tardó en responder especificando que dicho viaje tendría un coste de 8.000 dinares libios, aproximadamente 1.500 euros al cambio.
Ante este hecho no sólo cabe destacar que el mismo resulta coincidente con la presencia de Open Arms en el Mediterráneo Central, sino que el perfil utilizado para publicar éste y otros anuncios similares en varios grupos controlados por las mafias libias, llega a utilizar como imagen de cabecera una fotografía de la embarcación de la ONG. Algo a lo que recurren –con cada vez más frecuencia– estos traficantes como señuelo y garantía de que el viaje a Europa será completado por este tipo de organizaciones.
Un grupo con más de 70.000 miembros anuncia la llegada de la ONG
Por otro lado, el hecho mencionado con anterioridad no queda aislado dentro de los grupos de Facebook tutelados por los traficantes de personas afincados en Libia. En otra comunidad, conformada por casi 70.000 miembros y en la que se suceden numerosas ofertas coincidiendo con la presencia de oenegés en el Mediterráneo Central, tiene lugar una publicación que especifica detalles sobre el viaje de Open Arms hacia la zona de operatividad de las mafias.
Concretamente y en mitad de varios anuncios que cuentan con numerosas interacciones tiene lugar una publicación en la que se comparte un tuit de Open Arms traducido en árabe haciendo constar que «la ONG se dirige ahora hacia las costas de Túnez y las costas de Libia», matizando que esto son «buenas noticias para todos».
De esta forma, tanto traficantes de personas de afincados en el litoral tunecino, como aquellas mafias que ejercen su control sobre territorio libio, generan una atracción constante hacia sus potenciales clientes, atracción motivada por la presencia indefinida de organizaciones humanitarias en el Mediterráneo Central. Lejos de suponer una solución para estos supuestos refugiados, crean un evidente efecto llamada y forman el último eslabón para completar viajes ilegales con destino a Europa.
