El Servicio de Atención Integral a Personas Adultas Privadas de la Libertad (SNAI) de Ecuador ha informado este lunes de que al menos 13 presos han fallecido y dos han resultado heridos en la cárcel ecuatoriana de Bellavista en la localidad de Santo Domingo de los Tsáchilas.
#ATENCIÓN | El #SNAI informa: En el #CPLSantoDomingo N°1 se registra una riña al interior del centro.
— SNAI Ecuador (@SNAI_Ec) July 18, 2022
Al conocer de este hecho se ha solicitado de inmediato el apoyo de la Policía Nacional, Fuerzas Armadas, Ministerio de Salud Pública.
Noticia en desarrollo… pic.twitter.com/GYsJwVbaHq
Tras conocer el altercado en la cárcel de Santo Domingo, el SNAI ha señalado en su cuenta de Twitter que han solicitado «el apoyo inmediato de la Policía Nacional, las Fuerzas Armadas y el Ministerio de Salud Pública».
A las 17.54 horas (hora local), el SNAI ha indicado que ya se había reestablecido el control de ese centro penitenciario con el apoyo de las fuerzas de seguridad.
«Las instituciones a cargo de la seguridad interna y externa se mantienen vigilando el centro. Mientras la verificación de fallecidos se llevará a cabo por parte de Fiscalía, como órgano competente para la verificación de víctimas», ha afirmado el SNAI.
En octubre pasado, el Organismo Técnico del Sistema Nacional de Rehabilitación Social definió un plan de trabajo para el fortalecimiento de su sistema carcelario, para encarar la crisis en el sector afectado por las frecuentes matanzas entre reos.
El Gobierno de Guillermo Lasso prometió en mayo reformar el sistema penitenciario, marcado de forma recurrente por incidentes que llegan incluso a cobrarse decenas de vidas. Sólo el año pasado habrían muerto unos 300 reclusos, por lo que el Ejecutivo planteó una serie de iniciativas, entre ellas un censo penitenciario.
Asimismo, la reyerta en la prisión de Santo Domingo es la segunda que se registra en ese centro desde mayo pasado, cuando se reportaron 44 muertos y 10 heridos, y que se suma a los más de 400 fallecidos desde 2020 que han dejado los frecuentes enfrentamientos entre bandas que se disputan el control de las cárceles, según advierten las autoridades.