En sintonía con su antecesor, el golpista Pedro Castillo -uno de los presidentes más impopulares de la historia peruana-, la desaprobación de la presidente Dina Boluarte alcanza su máximo pico desde que asumiera la jefatura del Estado el pasado 7 de diciembre de 2022, cuando Castillo ordenó el cierre ilegal del Parlamento y terminó detenido y hoy cumpliendo prisión preventiva por los presuntos delitos de rebelión y conspiración.
De acuerdo con una última encuesta Ipsos para América Televisión, Boluarte tiene un 77% de desaprobación a nivel nacional. La cifra representa un aumento de un punto a comparación de marzo pasado cuando registraba 76% y seis puntos porcentuales con respecto a enero. La principal causa de rechazo hacia a la jefa de Estado es que no estaría buscando soluciones para mejorar la situación económica del país (45%), golpeado por los rezagos de la pandemia del covid-19 y las violentas protestas que paralizaron al país, azuzadas por la izquierda enemiga de Boluarte, a la que ven como traidora por suceder a Castillo.
Otras causas son porque no maneja bien las protestas sociales (38%), estar involucrada en actos de corrupción (31%) y no está apoyando a los damnificados de las lluvias y los huaicos (30%), quiere quedarse en el gobierno/no desea el adelanto de las elecciones (28%), traicionó a Pedro Castillo/aliada del Congreso (27%) y no apoya a los pobres (22%).
Por su parte, solamente el 15% respalda a la mandataria peruana. El apoyo se debe porque está realizando mejoras en la economía (41%) y apoya a los damnificados de las lluvias (27%) en el norte del país, una región que no se movilizó contra Boluarte y que ha sido castigada por un ciclón que ha destruido carreteras, sembríos y viviendas. Además, se alerta de la llegada del Fenómeno del Niño.
Congreso desaprobado
El 84% de la población no respalda a la representación nacional. Esto representa un aumento de dos puntos a diferencia de febrero y marzo. En tanto, el 15% le brinda su apoyo.
De otro lado, resulta preocupante la percepción de la ciudadanía con respecto al papel que el Congreso tuvo durante el fallido autogolpe del comunista Castillo.
Ante la pregunta sobre lo que ocurrió el 7 de diciembre del año pasado, el 49% de los encuestados cree que el Parlamento hizo un golpe de Estado para sacar al sindicalista del poder, mientras el 46% considera lo contrario, que fue Castillo, el títere del Grupo de Puebla y el Foro de Sao Paulo, quien quiso quebrar el orden constitucional al ordenar el cierre del Legislativo y la intervención del Poder Judicial y Fiscalía para convocar a una asamblea constituyente de corte chavista, una de sus mayores ambiciones.