Hace escasos días, Elon Musk anunció que una nueva cuenta de X llamada «Alexandre Files» revelaría las ilegalidades cometidas por Alexandre de Moraes, el juez brasileño, amigo del presidente Lula da Silva, que ha ordenado bloquear esta red social en Brasil.
Ahora, han anunciado que la censura impulsada desde la Justicia brasileña no fue sólo a destacados políticos y periodistas del espectro de la derecha, sino que también afectó a ciudadanos brasileños comunes que no cometieron ningún delito. Según una orden del 9 de marzo de 2023, De Moraes, siguiendo el ejemplo de otras órdenes similares, impuso en secreto la censura de las cuentas de Katia Graceli (@KatiaGraceli), Beto Rossi (@rossi_beto) y Lucinha Ramiro (@ramiromarlucia). Esto, pese a que ninguna cuenta supera los 1.000 seguidores y no cometieron ninguna irregularidad.
Según defiende la cuenta de X (antes Twitter), esta orden habría violado garantías constitucionales al debido proceso legal, la libertad de expresión y la protección de datos personales. «Las cuentas de los ciudadanos antes mencionados fueron seguidas por un pequeño número de personas y sus publicaciones sólo expresaban apoyo a puntos de vista y políticos conservadores», revelan.
Hacen hincapié en que el juez izquierdista no logró identificar una sola publicación ilegal de estos individuos, por lo que consideran «ilógico» que sus cuentas fueran bloqueadas. «Lo más probable es que hayan sido censurados porque Moraes no estaba de acuerdo con sus creencias políticas. Moraes afirma que está protegiendo la democracia. Pero censurar un lado de un debate político es lo opuesto a la democracia», concluyen en el comunicado.