El presidente iraní, Ebrahim Raisi, ha entregado este sábado a su homólogo venezolano, Nicolás Maduro, en una ceremonia formal en el golfo Pérsico el súperpetrolero ‘Aframax 2’, el segundo buque de transporte de crudo fabricado por Irán.
El buque ha sido construido por la Empresa Industrial Marítima de Irán, que fabricará otros dos petroleros más para el país caribeño. El ‘Aframax 2’ fue botado el pasado miércoles tras dos años de construcción, según ha relatado el consejero delegado de la empresa, Alí Zarei.
El petrolero pesa 21.500 toneladas, tiene 250 metros de eslora, 44 metros de manga y 21 de altura. Puede transportar 113.000 toneladas de crudo, equivalentes a 750.000 barriles, con un motor de 21.000 caballos y tres generadores diésel capaces de generar 900 kilowatios de electricidad cada uno.
Raisi ha comparecido en rueda de prensa con Maduro en Teherán y ha destacado que su país siempre ha buscado estrechar lazos «con países independientes» y en ese sentido ha destacado la «ejemplar resistencia de Venezuela frente al imperialismo».
Además, Raisi ha recordado las sanciones impuestas contra Irán en las cuatro últimas décadas y ha destacado que la propia Casa Blanca ha reconocido que han fracasado, en lo que supone «una victoria para el pueblo iraní».
Raisi se ha referido a las sanciones impuestas a Venezuela y ha destacado que Caracas «está decidida a permanecer firme frente a sus enemigos».
Por su parte, Maduro ha destacado que «Venezuela e Irán están en primera línea para dar forma a un mundo libre de imperialismo y potencias dominantes». Así, ha señalado que «la era de dominio militar mundial de Estados Unidos ha terminado«.
«Venezuela e Irán deben compartir conocimientos en todos los campos para generar un mundo nuevo porque existe una transición en marcha hacia un nuevo sistema geopolítico«, ha resaltado. Además, Maduro ha invitado a incrementar las inversiones iraníes en Venezuela.
Maduro también se ha reunido con el líder iraní, el ayatolá Alí Jamenei, quien ha destacado que «la resistencia es la única forma de superar la presión de Estados Unidos» y ha puesto en valor la «resistencia» de Maduro y Venezuela.
Maduro llegó el viernes a Teherán y ha firmado un plan de cooperación estratégica bilateral que se prolongará por espacio de 20 años.