El Gobierno colombiano anunció un aumento del 16% en el salario mínimo el cual entrará en vigencia a partir del primero de enero de 2023.
La ministra de Trabajo, Gloria Inés Ramírez, anunció este jueves 22 de diciembre que ya se firmó el decreto que establecerá el salario mínimo en 1.160.000 pesos colombianos; mientras que el auxilio de transporte subirá 20%, ubicándose en 140.000.
La medida tomada por el Gobierno y que habría sido concertada con empleadores y trabajadores, implicará un inminente aumento de precios en productos y servicios elevando la inflación.
Una de las medidas tomadas por el gobierno de Petro será la desindexación de elementos y actividades que están atados al salario mínimo. Entre estos, copagos en salud, medicina prepagada, gastos notariales, multas, matrículas y servicios del transporte.
De acuerdo con Ramírez, la próxima semana se publicarán otros 120 servicios que se desindexarán del salario. También anunció otras medidas relacionadas con las tarifas de energía, los precios de productos farmacéuticos, y la revisión de la tasa de usura.
Sobre esto Gustavo Petro confirmó dijo esperar que esto permita que “se recupere el poder de compra, el nivel de ingresos” de los colombianos y que “se convierta en motor del crecimiento económico”.
Este anuncio se presentó luego de dos intensas semanas en las que se sostuvieron prolongadas discusiones entre las centrales obreras, agremiaciones de empresarios y Gobierno nacional.
De acuerdo con el decano de la Facultad de Economía de la Universidad Externado de Colombia, Juan Pablo Herrera, de con “gran preocupación este incremento” debido a que a pesar de reconocer el impacto positivo que tendría en poco más de 6 millones de colombianos, sería mayores las consecuencias negativas en la formalización y generación de empleo, hasta en el costo de los alimentos.
“Si duda el ajuste del salario mínimo afecta positivamente a este subconjunto de la población: sin embrago, tal como lo ha advertido un trabajo recientemente publicado el Banco de la República se podrían presentar posibles efectos negativos para el sistema económico en escenarios en los cuales el ajuste del salario mínimo resulta estar por encima de la inflación”, alertó a Caracol.
“Un ajuste del salario mínimo de 1 % por encima de la inflación no solo generaría un desincentivo para la generación de nuevos puestos de trabajo, sino a su vez la destrucción de los empleos existentes en la economía”, señaló Herrera como una de las posibles consecuencias.
