El presidente de Ecuador, Guillermo Lasso, ha asegurado este jueves haber cumplido con su palabra de aplicar medidas estrictas contra los recientes episodios de violencia registrados en la cárcel más grande del país al trasladar a centenares de reos.
«Dijimos que no nos temblaría la mano y no nos tembló. La estrategia de traslado de las cabecillas la mantuvimos al milímetro», ha expresado el mandatario ecuatoriano evaluando los operativos desarrollados en las últimas horas por las fuerzas de seguridad para tomar el control de la Cárcel del Litoral, en Guayaquil, ha informado ‘El Universo’.
En un operativo llevado a cabo por la Policía Nacional, el Ejército y el Servicio Nacional de Atención Integral a Personas Adultas Privadas de la Libertad y a Adolescentes Infractores (SNAI), centenares de presos han sido sometidos en los patios del pabellón conflictivo y algunos otros habían sido trasladados, según ha difundido la Presidencia de Ecuador en un comunicado.
«Este Gobierno no se doblega ante narcoterroristas: en este país no van a imponer su voluntad. Aquí estamos para hacerles frente y proteger a los 18 millones de ecuatorianos que merecen vivir en paz. ¡Que Dios bendiga al Ecuador!», ha señalado Lasso, tal y como ha recogido el citado diario.
Pocas horas antes, después de la reunión del Consejo de Seguridad Pública y del Estado (Cosepe), el secretario de Seguridad Pública, Diego Ordóñez, había informado de que la decisión del Gobierno era «combatir la amenaza del narcotráfico y crimen organizado y de recuperar el control interno de los centros carcelarios», después de que se registran nuevos incidentes en la cárcel de Guayaquil.
Durante la operación, en la que han participado 700 policías y 470 militares, han resultado heridos nueve policías y tres soldados. Horas antes, se habían registrado dos muertes y seis reos herido en el marco de un nuevo enfrentamiento en la Penitenciaría del Litoral.