Trabajadores de la educación pública y de otros sectores del Estado se han manifestado este lunes y por tercera semana consecutiva para pedir unos salarios dignos en varias ciudades de Venezuela.
En Caracas los manifestantes han marchado hasta la sede de la Fiscalía y las movilizaciones se han reproducido en otros estados como Mérida, Táchira, Trujillo, Zulia, Lara, Anzoátegui, Portuguesa, Apure, La Guaira, Amazonas, Nueva Esparta, Guárico y Monagas.
«Con hambre y miseria no hay educación», han sido algunas de las consignas de los docentes durante la manifestación. En la movilización también han participado jubilados y pensionistas para exigir una retribución que les garantice una vejez digna, en la que puedan adquirir todo lo necesario para vivir cómodamente: alimentos, medicinas, calzado y vestido.
Así, los pensionistas han denunciado que los 130 bolívares -5,86 euros al cambio- no bastan siquiera para comprar un kilo de carne o de queso. «Trabajamos durante muchos años y ahora tenemos que andar mendigando en el calle por ese mísero sueldo que no alcanza para nada. No puedo comprar mis medicinas, y estoy enferma. No he comido, pero aún así salgo a marchar», ha declarado María Nieves.
Otras organizaciones plantean tres reivindicaciones: salarios indexados a la tasa del dólar, seguro médico y funerario y derogación del instructivo de la Oficina Nacional de Presupuesto (ONAPRE).
La manifestación de Caracas se llevó a cabo bajo un importante despliegue de las fuerzas represivas del chavismo.