Medio centenar de hombres y jóvenes ha sido secuestrado por un grupo armado de los pueblos de mayoría chií de Nubul y Zahrá, en la provincia norteña de Alepo, donde ya han comenzado negociaciones para su puesta en liberad, según ha informado el Observatorio Sirio de Derechos Humanos.
La ONG precisó que decenas de civiles que viajaban en autobuses desde el norte de Alepo a la vecina provincia de Idleb, controlada casi totalmente por facciones islámicas, fueron interceptados por hombres armados a su paso por esas dos poblaciones, que están en poder de efectivos y milicias gubernamentales.
Las mujeres fueron liberadas pero los varones continúan retenidos.
Los secuestradores exigen a una facción que opera en la localidad de Azaz, en manos de grupos opositores, y también en el norte de Alepo, la entrega de un joven sirio tomado como rehén en la zona.
El joven, que residía en Europa, había vuelto a Siria a través de la frontera con Turquía cuando fue capturado, y es miembro de una de las familias de los secuestradores de Nubul y Zahrá.
Por su parte, el grupo que mantiene a ese joven como rehén pide la puesta en libertad de cuatro combatientes en poder de las autoridades sirias, que aún no han contestado a esta exigencia.
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