El Santo Padre cumplirá 87 años dentro de una semana. «Bondadoso» como la gente mayor, ha explicado, mantuvo hace unos días una afectuosa llamada con el nuevo presidente de Argentina, Javier Milei. Aunque el tono bronco de la campaña presidencial llegó al Vaticano, en unas acusaciones cruzadas poco diplomáticas, Francisco ha mostrado en una entrevista reciente su «fe» por Javier Milei.
«Le tengo fe a los políticos porque creo que la política, como dijo un Papa anterior, es la forma más elevada de la caridad, es el amor al pueblo, el amor político, la polis. Lamentablemente, los malos políticos convierten eso en un negocio: ‘¿Cuánto obtengo al entrar y cuánto al salir?’ La política no es eso. Esa no es la esencia de la política», ha declarado el Papa Francisco.
Preguntados por sus viajes internacionales, el Papa ha explicado que «uno está asegurado en Bélgica, eso ya está confirmado, y hay dos viajes largos pendientes, uno para la Polinesia y otro para Argentina. Veremos cómo van las cosas». Precisamente por su viaje a Argentina, invitado por el presidente Milei, el Santo Padre ha lamentado que por su estado de salud la visita esté en el aire al tiempo que ha desmentido las malas relaciones con el nuevo Jefe de Estado.
«En la campaña electoral se dicen cosas en broma. Se dicen seriamente sí, pero son cosas provisorias, que se usan para crear atención. Y después caen solas», ha asegurado. Precisamente por su «fe» a Milei, Francisco ha explicado que «hay que distinguir entre lo que dice un político en campaña electoral y lo que va a hacer después: lo concreto, tomar decisiones».
