La pasada semana, el Parlamento del territorio británico de Bermudas aprobó una propuesta encaminada a abolir el ‘matrimonio’ homosexual
La pasada semana, el Parlamento del territorio británico de Bermudas aprobó una propuesta encaminada a abolir el ‘matrimonio’ homosexual y se tornó, en consecuencia, en la primera cámara legislativa del mundo en restaurar la natural definición de la institución matrimonial después de haberla alterado. Así, en el proyecto de ley refrendado, se precisa que el término ‘matrimonio’ no designa sino la unión entre un hombre y una mujer.
En cualquier caso, la batalla no está ganada aún. Para que la propuesta aprobada se convierta definitivamente en ley, debe ser firmada por el gobernador de Bermudas, John Rankin. Y lo cierto es que éste, que representa a la monarquía británica en el territorio, está recibiendo opresivas presiones del lobby LGTB.
No en vano, la persona que consiguió que el Tribunal Supremo de Bermudas legalizase el ‘matrimonio’ gay, Winston Godwin, ha difundido un comunicado en el que critica cáusticamente el proyecto aprobado por el Parlamento: ‘El proyecto efectivamente establece que eres un ciudadano de segunda clase por aquel a quien amas, acrecienta la división en un país que está ya muy dividido y ataca a una minoría’.
Por su parte, el parlamentario laborista Chris Bryant arremetió contra Bermudas el sábado en la Cámara de los Comunes: ‘Bermudas lo quiere todo. Quiere la protección de ser un territorio británico de ultramar, pero no desea sostener los principios y valores de nuestro Estado’, aseveró Bryant en referencia a la abolición del ‘matrimonio’ gay en el territorio de ultramar.
En este sentido, y con talante manifiestamente despótico, el laborista abogó por uniformizar los derechos LGTB en todo el territorio británico: ‘Un ciudadano de Reino Unido, esté en la parte del país en que esté, debe gozar de los mismos derechos’.
Tal es el clima de presión, que el gobernador de Bermudas está sopesando claudicar. Así, tal y como relata el Daily Mail, habría consultado con el secretario de Exteriores británico, Boris Johnson, los pasos a seguir a partir de ahora. No en vano, necesita la anuencia de éste para poder vetar un proyecto de ley aprobado por el Parlamento.
El matrimonio homosexual en Reino Unido
Como casi todos los países occidentales, los diversos territorios de Reino Unido han ido adaptando sus legislaciones a los dogmas progresistas durante el transcurso del decenio. Así, en Inglaterra y Gales el ‘matrimonio’ gay fue legalizado en 2013, mientras que en Escocia se reconoció en 2014.
Si Rankin firma el proyecto de ley aprobado democráticamente en el Parlamento, Bermudas se tornará en el primer territorio en restaurar la definición natural del matrimonio después de haberla alterado.