«Exhorto a que sus resultados lleven a exigir la rendición de cuentas de todos los culpables, incluso en los niveles más altos de la Iglesia», dicen desde Texas.
El obispo de la Diócesis de Tyler (Texas), Joseph E. Stricklan, ha mostrado su apoyo a las «acusaciones» lanzadas por el antiguo nuncio en Estados Unidos, Carlo Maria Viganò, sobre el conocimiento del papa Francisco de los casos de abusos sexuales, informaron hoy medios religiosos.
En una carta dirigida a sus feligreses difundida este martes Stricklan advierte de que todavía se trata de «alegaciones», pero, al considerarlas «creíbles», solicita a la Iglesia Católica que responda a ellas con «una investigación exhaustiva similar a las realizadas en otros casos»: «No tengo la autoridad para iniciar un proceso de este tipo, pero prestaré cualquier apoyo que se necesite para pedir que se realice (la investigación) y exhorto a que sus resultados lleven a exigir la rendición de cuentas de todos los culpables, incluso en los niveles más altos de la Iglesia», insistió.
El obispo texano ordenó que todos los sacerdotes de su diócesis incluyeran este aviso en las misas y que fuera publicado «de inmediato» en sus sitios web y las redes sociales.
La polémica se produjo tras la misiva, de 11 folios de extensión, escrita por Viganò en la que pedía la renuncia del papa Francisco al asegurar que conocía desde junio de 2013 las acusaciones de abusos sexuales que pesan sobre el cardenal Theodore McCarrick, quien fue sancionado en junio pasado por el pontífice.
El Papa rehabilitó a McCarrick sabiendo que era un depredador sexual
El arzobispo acusó también a otros miembros de la Curia de formar un «lobby gay» y encubrir las acusaciones contra el cardenal estadounidense.
Por su parte, el papa Francisco admitió haber leído el manifiesto del antiguo nuncio, pero prefirió no pronunciarse, ya que para él «el texto habla por sí mismo». En una conferencia de prensa durante el vuelo de regreso de Dublín a Roma, donde asistió al Encuentro Mundial de las Familias, el líder religioso invitó a los periodistas a hacer lo propio y «sacar sus propias conclusiones con madurez profesional».
Stricklan no es el único
La publicación de Viganó ha sido respaldada, también, por una de las personas a las que cita en su carta. Así, el que fuera primer consejero de la nunciatura en Washington, monseñor Jean-François Lantheaume, dijo que el exnuncio decía «la verdad «en su declaración.
En ese documento Viganò cita directamente a monseñor Lantheaume afirmando que él mismo le contó el encuentro en el que se comunicó a McCarrick su supensión, después de su llegada a D.C para reemplazar a Sambi como nuncio en 2011: «Monseñor Jean-François Lantheaume, entonces primer Consejero de la Nunciatura en Washington y Encargado de Negocios interino después de la inesperada muerte del Nuncio Sambi en Baltimore, me dijo -y está dipuesto a testificar- que hubo una conversación tormentosa, que duró más de una hora, del nuncio Sambi con el Cardenal McCarrick. Monseñor Lantheaume me dijo que «la voz del Nuncio podía escucharse en todo el corredor».
Tras esta afirmación, Catholic Agency News se puso en contacto con monseñor Lantheaume y solicitó una entrevista con él. Lantheaume, que ahora ha dejado el cuerpo diplomático del Vaticano y sirve en el ministerio sacerdotal en Francia, se negó a conceder la entrevista pero sí confirmó: «Viganò dijo la verdad. Eso es todo».
