Este descenso, que bien podría revelar un tímido fortalecimiento de la institución familiar, se registra en todas las formas de demandas de disolución matrimonial
No todo son malas noticias en este mes de octubre marcado por el separatismo catalán y los incendios desatados en Galicia, Asturias y nuestra vecina Portugal. De esta manera, en el segundo trimestre de 2017 las separaciones y los divorcios – llamadas técnicamente demandas de disolución matrimonial – han disminuido en un 10,3% respecto al mismo período del año anterior.
De esta manera, según los datos recogidos por la Sección de Estadística del Consejo General del Poder Judicial, el número separaciones y divorcios solicitado en el segundo trimestre de 2017 es de 29.988, mientras que los solicitados en el segundo trimestre de 2016 ascendieron a 33.434.
Aunque este descenso, que bien podría revelar un tímido fortalecimiento de la institución familiar, se registra en todas las formas de demandas de disolución matrimonial, hay una que sobresale particularmente. Es el caso de las separaciones no consensuadas, que, con un 14,6% de caída, se han reducido a la cifra de 440. Por su parte, las separaciones de mutuo acuerdo han disminuido algo más de un 12% (de 1061 a 933).
Las cifras relativas a los divorcios son también esperanzadoras. No en vano, las 17.095 peticiones de divorcio consensuado que se han presentado constituyen una cifra un 9.3% inferior a las registradas entre el 1 de abril y el 30 de junio de 2016, mientras que las demandas de divorcio por vía contenciosa – no consensuadas – han disminuido también algo más del 9% (se han solicitado 11.520).
Asimismo, en el segundo trimestre de 2017 se han presentado 36 solicitudes de nulidad matrimonial; cifra que difiere levemente de las 46 registradas en ese período del año 2016.
Canarias y Valencia, las comunidades con más separaciones y divorcios
Las comunidades autónomas de Canarias – que es ya un clásico en esta lista – y Valencia son aquéllas en que se han producido un mayor número de divorcios y separaciones por cada 10.000 habitantes entre el 1 de abril y el 30 de junio de 2017. De esta manera, en Canarias, la cifra asciende al 7,4% y en Valencia, al 7,39%.
No obstante, a los preocupantes números registrados en estas dos regiones se aproximan los de las comunidades de Asturias (6,99%) y Cataluña (6,89%).
En el otro extremo, Castilla y León (5,15%) y Aragón (5,4%) son las comunidades autónomas donde menos demandas de disolución matrimonial por cada 10.000 habitantes se han presentado en el segundo trimestre de 2017, algo que va en sintonía con las cifras de trimestres anteriores.
Estas cifras, junto a la registrada en el conjunto de España (6,4% respecto a los 10.000 habitantes), consolidan un escenario que, aunque turbador, da lugar a la esperanza.
