Los Dallas Mavericks, en uno de los movimientos más chocantes de la historia de la NBA, han decidido este sábado traspasar a su gran estrella, Luka Doncic, a Los Angeles Lakers de Lebron James en una operación a tres bandas que implica que el equipo de Texas recibirá a Anthony Davis.
La decisión ha provocado un terremoto especialmente en el entorno del exjugador del Real Madrid, de 25 años, y que ha hecho toda su carrera en EEUU en el mismo equipo. Doncic no había pedido irse, y de hecho estaba negociando una extensión de su contrato de cinco años.