El 65% de los españoles ha reducido el presupuesto que dedica al consumo de productos no esenciales, en tanto que un 13% lo ha parado completamente, como consecuencia a la preocupación latente entre los consumidores por la evolución de los precios, según el informe ‘Global Consumer Insights Survey 2023’, elaborado por la consultora PwC.
En concreto, el crecimiento de la inflación, tal y como ha detallado el estudio, está modificando «sustancialmente» los hábitos de compra de los consumidores en el mundo y en España. De hecho, el 96% de los encuestados, globalmente, espera tomar algún tipo de iniciativa de ahorro en los próximos seis meses.
En la misma línea, cinco de cada diez del conjunto de los entrevistados se ha declarado «muy» o «extremadamente» preocupado por el contexto económico actual y su impacto en el coste de la vida y en sus finanzas domésticas.
Asimismo, PwW ha subrayado que los consumidores tienen previsto explorar otro tipo de hábitos, como comprar solo determinados productos cuando estén en promoción o cuando exista una oferta especial, buscar otras marcas alternativas más baratas de artículos que compran habitualmente o acudir a las ‘marcas blancas’. Un 49% de los encuestados españoles esperan reducir sus gastos en moda, mientras que un 47% en productos electrónicos y un 46% en entretenimiento en el hogar.
A escala global, más del 70% los 9.180 consumidores de 24 países que han dado su opinión ha afirmado estar dispuesto, en mayor o menor medida, a pagar más por alimentos producidos localmente, así como por productos fabricados por compañías reconocidas por su ética, su apoyo a los derechos humanos o por no experimentar con animales.
Respecto a los canales de compra preferidos por los consumidores en los últimos doce meses, el informe ha puesto de manifiesto que, tras la pandemia, la compra en establecimientos físicos ha rebotado hasta seguir siendo «el más popular» para el 36% de los españoles, que acuden a ellos semanal y diariamente.
Adicionalmente, el 26% de los consumidores españoles ha subrayado que compra a través del teléfono, mientras que el 22% prefiere utilizar el ordenador.
El estudio ha considerado la opinión de los usuarios sobre sus preferencias de que la experiencia de compra en la tienda física mejore, ya que consideran que tiene que enriquecerse mediante tecnologías digitales, denominadas «figital», según PwC.
