El consejero de Presidencia del Gobierno andaluz, Antonio Sanz, ha reclamado un estatuto fiscal propio para el Campo de Gibraltar. También la incorporación de la Junta de Andalucía a la negociación en para el acuerdo de la futura relación del Peñón con la UE.
Así lo ha hecho durante la reunión que ha mantenido junto con varios alcaldes del Campo de Gibraltar con el ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares. En encuentro se produjo en Madrid para conocer las negociaciones entre Bruselas y Londres.
«Estamos ante una oportunidad única», ha sostenido en declaraciones al término del encuentro. E insiste en que la Junta quiere «un acuerdo pero no cualquier acuerdo». Por ello, ha precisado, el acuerdo «tiene que impulsar económica y socialmente al Campo Gibraltar». Exige reequilibrar los territorios y tiene reducir diferencias de renta, «que son escandalosas entre una zona y otra», afirma.
En ese sentido, Sanz ha explicado que una de las peticiones a Albares de la Junta de Andalucía ha sido «la creación de un estatuto fiscal propio para el Campo de Gibraltar». Recuerda que ya lo tienen las islas o Ceuta y Melilla. «La situación es única», ha esgrimido, considerando que es algo que la UE debería respaldar.
El consejero ha advertido de que «es imposible» que si se suprime la Verja y se abre a la libre circulación de personas y mercancías como se prevé, el Campo de Gibraltar pueda «competir en igual de condiciones».
Así las cosas, el consejero aclara que aunque la Junta mantiene la «lealtad» y quiere estar en la negociación. «Reclamamos que se vuelva a dar participación a la Junta de Andalucía, como ha ocurrido en otras ocasiones, en otras negociaciones», ha sostenido.
«Gibraltar, que no es un Estado soberano, participa en las negociaciones invitado por su Gobierno y el Gobierno de España no invita a la Junta de Andalucía», ha incidido Sanz. «Se nos ha respondido desfavorablemente», ha precisado el consejero andaluz.
Por otra parte, Sanz ha afeado que no hubiera habido contactos a este nivel desde mayo de 2022. Con todo, ha trasladado la «mano tendida» por parte de la Junta y pedido «una mesa interadministrativa».