La demanda de préstamos y líneas de crédito por parte de las empresas se desplomó en el segundo trimestre hasta un nuevo mínimo histórico como consecuencia de la subida de los tipos de interés y la caída de la inversión, según recoge la encuesta de préstamos bancarios elaborada por el Banco Central Europeo (BCE), que anticipa una nueva caída del dato en el tercer trimestre, aunque de menor intensidad.
Entre abril y junio, la demanda neta de préstamos de las empresas de la zona del euro se redujo considerablemente, con un porcentaje neto del -42%, frente al -38% del trimestre anterior, lo que implica un mínimo histórico desde el inicio de la encuesta del BCE en 2003.
De hecho, la caída observada fue «sustancialmente más fuerte de lo esperado por los bancos en el trimestre anterior«, según advierte el estudio del banco central, cuyo Consejo de Gobierno volverá a reunirse este jueves para determinar la política monetaria de la zona euro, con una prácticamente segura subida de 25 puntos básicos de los tipos de interés.
Según la encuesta, la disminución neta de la demanda de préstamos fue la más fuerte desde el inicio de la serie histórica en 2003 para las pymes, mientras que la caída neta de la demanda de préstamos por las grandes empresas se mantuvo ligeramente más limitada que durante la crisis financiera mundial.
Asimismo, la disminución neta de la demanda también fue la más fuerte en la historia del estudio para los préstamos a largo plazo, mientras que la demanda de préstamos a corto plazo disminuyó en menor medida, pero aún cerca del mínimo histórico registrado durante la crisis financiera mundial.
«El aumento de los tipos de interés y la disminución de la inversión fija siguieron siendo los principales impulsores de la disminución neta de la demanda de préstamos», señala el banco central, añadiendo que otros factores que explican el desplome de la demanda fueron las menores necesidades de financiación para fusiones y adquisiciones, la financiación interna disponible con mejores beneficios empresariales y, en menor medida, la emisión de títulos de deuda.
En cualquier caso, el BCE destaca que, tanto para las pymes como para las grandes empresas, el nivel general de los tipos de interés y unas menores necesidades de financiación de las empresas para la inversión fija fueron los principales impulsores de la reducción de la demanda de préstamos en el trimestre.
Por países, el estudio constata que la caída de la demanda de préstamos a empresas alcanzó niveles considerables en las cuatro mayores economías de la zona del euro.
En consonancia con el agregado de la zona del euro, los tipos de interés más elevados y las menores necesidades de financiación para la inversión fija fueron los principales impulsores de esta reducción de la demanda de préstamos en los cuatro países.
Asimismo, la menor actividad de fusiones y adquisiciones también tuvo un impacto negativo notable en la demanda de préstamos en los cuatro países más grandes.
De cara al tercer trimestre del año, los bancos de la eurozona esperan una nueva disminución neta de la demanda de préstamos a empresas, pero mucho menor que en el segundo trimestre.
No obstante, el BCE apunta que, desde finales de 2022, los bancos han tendido a tener expectativas «demasiado positivas» sobre la demanda de préstamos, lo que sugiere que las expectativas para el tercer trimestre también podrían ser demasiado optimistas.
En este sentido, las entidades esperan que el ritmo de disminución de la demanda crediticia sea de menor intensidad tanto para la demanda crediticia de corto como de largo plazo en el tercer trimestre.
Demanda de hipotecas
Por otro lado, en el segundo trimestre, los bancos de la zona euro también informaron de una fuerte disminución neta de la demanda de préstamos para la adquisición de vivienda que, sin embargo, fue inferior a la bajada neta observada en los dos trimestres anteriores.
En este sentido, las principales causas apuntadas para el debilitamiento de la demanda de hipotecas fueron las tasas de interés más altas, el debilitamiento de las perspectivas del mercado de la vivienda y la baja confianza del consumidor.
La demanda de préstamos para vivienda disminuyó sustancialmente en los cuatro países más grandes de la zona del euro por el impacto de los tipos de interés y las perspectivas del mercado inmobiliario. Entre estos factores, el aumento de las tasas de interés tuvo el mayor impacto amortiguador en todos los países, mientras que las perspectivas negativas del mercado inmobiliario lastraron más en Francia que en Alemania, España e Italia.
Asimismo, la encuesta del BCE constata una disminución neta en la demanda de crédito al consumo y otros préstamos a los hogares, impulsada principalmente por el aumento de tipos de interés y la baja confianza del consumidor.
De cara al próximo trimestre, los bancos encuestados esperan una disminución neta adicional, aunque notablemente menos pronunciada, en la demanda de préstamos para vivienda, y una disminución neta algo menor en la demanda de crédito al consumo.
Condiciones de préstamo
Desde el lado de la oferta, según la encuesta sobre préstamos bancarios de la zona euro, los estándares crediticios para préstamos o líneas de crédito a empresas se endurecieron aún más en el segundo trimestre de 2023, aunque coon menor intensidad que en el primer trimestre del año y en línea con lo que esperaban los bancos.
«El endurecimiento neto acumulado desde principios de 2022 ha sido sustancial, y los resultados de la encuesta han proporcionado indicaciones tempranas sobre el debilitamiento significativo de la dinámica crediticia observado desde el otoño pasado», destaca el BCE.
Asimismo, las entidades también informaron de un endurecimiento neto adicional de sus estándares crediticios para los préstamos a hogares para adquisición de vivienda, así como crédito al consumo y otros préstamos a hogares.
No obstante, el endurecimiento neto registrado fue menos pronunciado que en el trimestre anterior para los préstamos para vivienda, mientras que fue más pronunciado para el crédito al consumo.
En este sentido, los bancos señalaron las percepciones de mayor riesgo relacionadas con las perspectivas económicas y la situación específica del prestatario, la menor tolerancia al riesgo y el mayor coste de los fondos como principales razones para el endurecimiento de los estándares.
Para el tercer trimestre de 2023, los bancos de la zona del euro esperan un endurecimiento neto adicional, aunque más moderado, de los estándares crediticios para los préstamos a empresas, mientras que anticipan unos estándares crediticios sin cambios para los préstamos a hogares para la adquisición de vivienda.
En el caso del crédito al consumo, los bancos de la zona euro esperan un endurecimiento neto menor de los estándares crediticios.