Eurostat publicó la pasada semana su informe anual en el que se recogen los resultados de una macroencuesta que ratifica la incapacidad de los ciudadanos para mantener el hogar adecuadamente caliente en invierno.
Las estadísticas de la Unión Europea sobre la renta y las condiciones de vida recogen microdatos actualizados y comparables sobre la renta, la pobreza, la exclusión social y las condiciones de vida. Esta recopilación es un instrumento clave para proporcionar información y es la principal fuente de datos a efectos de estimaciones de la distribución de la renta y las tasas de pobreza. AROPE (A Risk Of Poverty and Exclusion) sigue siendo el informe crucial para el seguimiento de las políticas sociales europeas.
En el caso de España, la población que no puede calentar su hogar se ha multiplicado casi por tres desde el año 2019.
En 2019, en España, el 7,5% de la población era incapaz de poder mantener el hogar adecuadamente caliente. Éramos el noveno país peor de la Unión y teníamos por delante a Bulgaria. Lituania, Chipre, Portugal, Grecia, Italia, Rumanía y Eslovaquia. Cuatro años después ocupamos la primera posición empatados con nuestros vecinos portugueses.
España (20,8%) ha pasado a ser el país que más ha empeorado seguido de Francia. Italia, por su parte, ha conseguido reducir esta tasa.
