La factura de la luz para un consumidor doméstico medio acogido a la tarifa regulada (Precio Voluntario al Pequeño Consumidor o PVPC) ha subido en octubre un 7,48 % con respecto a la de septiembre y ha alcanzado el segundo importe más alto en todo el año sólo por detrás del de enero.
El recibo para un consumidor tipo -con una potencia contratada de 4,4 kilovatios y un consumo anual de 3.000 kilovatios hora (250 kilovatios hora al mes)- se ha situado en octubre en 60,16 euros, según los resultados del simulador de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC).
La factura de la luz ha subido en octubre un 2,7 % con respecto al mismo mes del año pasado, aunque es un 12,18 % más barata que la de enero de 2017, que alcanzó los 67,49 euros.
En enero, los precios de la electricidad en el mercado mayorista -que determinan en torno a un tercio de la tarifa regulada- alcanzaron niveles récord por la ola de frío, la escasez de viento y lluvia, y la subida del gas natural.
En el mes de octubre que ahora acaba el precio de la electricidad para los consumidores acogidos a la tarifa regulada alcanzó su nivel más alto del año.
En concreto, se produjo en el tramo horario entre las 19 y las 20 horas del día 23, en que llegó a los 182,54 euros por megavatio hora.
La subida estuvo motivada por la menor aportación de las centrales hidráulicas y por el mayor coste de los servicios de ajuste del sistema, cuya finalidad es adaptar la oferta de energía eléctrica a la demanda en cada momento.
Hasta el pasado 23 de octubre el precio horario más alto que había habido este año para los consumidores acogidos al PVPC fue el que se registró entre las 21 y 22 horas del 25 de enero, en que alcanzó los 182,05 euros por megavatio hora.
A fin de evitar subidas como la que se produjo el 23 de octubre el Ministerio de Energía ha incluido en la orden ministerial sobre interrumpibilidad que ésta pueda ser utilizada como un mecanismo de mercado cuando sea más barata que la potencia terciaria que se utiliza para ajustar la oferta y demanda en el sistema.
El secretario de Estado de Energía, Daniel Navia, ha explicado este martes que, de esa forma, el operador del sistema, Red Eléctrica, podrá aplicar automáticamente energía procedente de la interrumpibilidad (mecanismo para dar respuesta a los desequilibrios entre generación y demanda y por el que se bonifica a las plantas industriales que están dispuestas a desconectase del sistema eléctrico en caso de necesidad) siempre que sea más barata.
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