«Ser es defenderse», Ramiro de Maeztu
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Rocío de Meer: «La inmigración masiva es un arma contra Europa»

Rocío de Meer.
Rocío de Meer.

En septiembre de 2021, VOX y el Grupo de los Conservadores y Reformistas Europeos (ERC) rompieron por primera vez un tabú en la I Cumbre Frontera Sur, celebrada en las Islas Canarias, al denunciar la amenaza que la inmigración ilegal y la expansión del islamismo en Europa suponen para la defensa de la identidad y los valores tradicionales de las naciones europeas. Tras el éxito de este primer encuentro, una de sus organizadoras, la diputada de VOX Rocío de Meer, nos habla del segundo congreso de Frontera Sur que, en esta ocasión, se traslada a Ceuta, una de las ciudades más afectadas por la inmigración masiva y sus consecuencias.

– En noviembre organiza en Ceuta el segundo congreso ‘Frontera Sur’ tras el éxito del celebrado en 2021 en Las Palmas, ¿qué es ‘Frontera Sur’?

‘Frontera Sur’ es, ante todo, una iniciativa necesaria. Y es necesaria por varios motivos. Por un lado, porque hace alusión a un debate que ha sido hurtado a los españoles y a los europeos en general. La inmigración masiva es una decisión política que está afectando a la vida de la gente, esa gente que ha sido desconocedora de esta decisión política porque se le ha ocultado deliberadamente. Nuestra primera intención es devolverles un debate que les han hurtado los poderes públicos. Por otro lado, es una iniciativa necesaria porque supone trasladar ese debate a uno de los puntos que lo sufre. La Frontera Sur tiene una serie de puntos calientes que, día a día, sufren las consecuencias de este conflicto. Cuando nos acostumbramos a una amenaza dejamos de denunciarla, y sabemos que no hay que resignarse. ‘Frontera Sur’ es un acto de resistencia, de seguir denunciando esta amenaza para que nadie la olvide y, además, hacerlo en uno de los puntos donde más se sufre. Por otro lado, Frontera Sur es la frontera entre la barbarie y la civilización cristiana y, por lo tanto, es la puerta, ese muro que debemos defender para defender lo que ha sido siempre Europa y lo que esperamos que siga siendo en el futuro.

– Ya me ha contestado parcialmente, ¿por qué en Ceuta?

Evidentemente porque Ceuta es uno de los puntos calientes. Creo que todo el mundo se quedó en shock ante los incidentes del pasado 17 de mayo de 2021. Ese lunes creo que mucha gente vio las imágenes de lo que nosotros llamamos invasión migratoria. Vio lo que eran 10.000 personas de golpe entrando por la frontera del Tarajal. Fue una especie de cataclismo mediático porque no se pudo ocultar lo que estaba sucediendo. Luego se intentó maquillar, pero en Ceuta constatamos –aunque también el problema tenga otros matices como pueden ser los intereses del rey de Marruecos en términos de expansión territorial– que la inmigración masiva es un arma contra Europa, es una manera de extorsionar a Europa, y eso lo constatamos en Ceuta el 17 de mayo de 2021.

– La plana mayor de VOX y muchos expertos en inmigración estarán allí, ¿qué espera de este encuentro?

Yo espero mucho debate, precisamente para devolvérselo a la gente. Hay un cartel muy interesante con intelectuales, periodistas, políticos, policías, académicos muy importantes y espero esa contrastación de ideas y que, sobre todo, la gente las reciba con entusiasmo.

-¿Cuál fue la primera conclusión que extrajo del primero congreso de ‘Frontera Sur’ en Las Palmas?

Esa necesidad que tenía Gran Canaria de que se hablara de lo suyo. Todo lo que había sufrido Gran Canaria, con los campamentos de Arguineguin, las islas colapsadas, las 20.000 personas que llegaron en un solo año que ya son más que las que tiene la isla de El Hierro. Los canarios vieron esa invasión y, sobre todo, ese contraste tan hipócrita y lamentable de cómo a los inmigrantes recién llegados se les ponía en hoteles de lujo que en ese momento estaban parados y cuando los canarios están sufriendo una de las tasas de paro más altas de España y están sufriendo tanta carestía. En medios de las colas del hambre veíamos ese escándalo que tenía impactada a la isla de Gran Canaria.

– Usted, junto con VOX, ha hecho de la lucha contra la inmigración ilegal uno de los ejes de su acción política. ¿Por qué es tan peligrosa?

Es peligrosa, pero no para todos. Quienes más la sufren son los españoles más modestos. La primera consecuencia de la inmigración ilegal está en los barrios más humildes de nuestro país, que es donde se sufre la inseguridad, las batallas campales, las luchas étnicas, las imposiciones culturales… La inmigración masiva también trae formas de delincuencia importada que no habíamos visto antes en nuestro país como las violaciones en manada, la ablación genital femenina, los matrimonios forzosos, los machetazos… Nosotros, los españoles, no vamos a otros lugares del mundo a atacar con machetes, es una cosa que no ha sido autóctona pero que, sin embargo, quizá sí es más frecuente en otros lugares donde la vida vale menos, donde los asesinatos y los homicidios son mucho más frecuentes. Quien sale perdiendo, sobre todo en Europa, con las políticas de fronteras abiertas son las mujeres porque la mujer siempre ha sido el alma de Europa pero en las sociedades de Frontera Sur hacia abajo ha sido la esclava del hombre. Esta visión absolutamente diferente de la mujer tiene también su traslación en la transformación cultural que están viviendo las mujeres más humildes de los lugares más modestos de España que son las que pasan miedo cuando van por la calle, las que no pueden salir a altas horas de la noche… Yo he hablado con muchísimas mujeres, en Campohermoso, en San Isidro que tienen miedo de ir al mercado y esconden sus monederos, también hay ancianos que lo están pasando muy mal en Usera o en otros lugares en los que hay una presión migratoria insoportable y hay altas tasas de criminalidad, que también se están ocultando a la opinión pública. Por lo tanto, la inseguridad es una de las consecuencias que los políticos progres niegan pero es una de las consecuencias más evidentes y uno de los motivos por los que esta gente humilde dejará de votar a las fuerzas progresistas en el futuro. Ellos, los que imponen estas políticas suicidas, viven muy bien, en grandes urbanizaciones donde no viven estos problemas que sí que sufre la gente sencilla.

– ¿Fue lo que ocurrió en Saint Denis la ‘mayor apertura de ojos’ para mucha gente en Europa sobre las consecuencias del multiculturalismo?

Saint Denis fue eso; la gente que no vive en esos barrios y no sabe lo que ocurre en ellos se quedó escandalizada y, evidentemente, es para escandalizarse, lo que están viviendo los europeos menos pudientes en muchos barrios es un auténtico infierno y viven permanentemente con miedo. Me estoy acordando de Carmen, una mujer a la que fui a ver a las 200 viviendas de Roquetas, que es una de las pocas españolas que sigue viviendo allí, y que vive frente a un edificio en el que hay prostitución infantil, narcotráfico, luchas étnicas, luchas culturales… y que había sufrido agresiones por el simple hecho de salir a la tienda de ultramarinos más cercana. Esta señora vivía aterrorizada, en la casa en la que llevaba viviendo toda la vida, por la cual se había hipotecado con su marido, que llevaba trabajando y cotizando toda la vida y por la que estaban ahora condenados a vivir un infierno los últimos días de su vida. Esto no lo ven los políticos progres en sus mansiones y lo vieron en Saint Denis.

– El mantra del ‘fin de las fronteras’ es uno de los favoritos del consenso progre, son muchos los que lo repiten cada día. ¿Qué se les puede decir?

Es el relato multicolor. La gente quiere escuchar lo que suena bien, y esto suena muy bien, pero no es la realidad. No solo no es la realidad, sino que es mentira, y no solo es mentira, sino que es peligroso. Este relato multicolor destruye sociedades. Destruir fronteras es destruir comunidades. La comunidad europea, española, tiene una manera de vivir determinada que se ve amenazada cuando importas masivamente otras culturas que necesariamente se van a imponer a la tuya. Es un relato multicolor que ha funcionado muy bien y que hay que desmontar porque es muy peligroso.

– Volviendo a Ceuta, ¿podemos creer al Gobierno cuando dice que la alusión de la OTAN a la «defensa de la integridad territorial de sus miembros» incorpora a las ciudades autónomas españolas?

Al Gobierno no le podemos creer, y si lo hubiera dicho el PP tampoco. España está en una alianza internacional de seguridad que no sabemos si va a proteger nuestros intereses territoriales más amenazados. Además de que existen pruebas de esta amenaza como la que vimos el 17 de mayo de 2021.

– Marruecos tiene sus intereses, que conocemos todos, ¿cuáles deben ser los intereses de España?

Primero España tiene que recuperar su soberanía, que es lo primero necesario para poder defender sus intereses. La soberanía es esa capacidad para tener un nombre en el mundo, para reducir las dependencias en elementos estratégicos y, por lo tanto, ser libre con respecto al resto de naciones y construir relaciones internacionales en función de tus propios intereses y no en los de las personas poderosas.

– ¿En qué afectan a la Frontera Sur la ruptura de las relaciones con Argelia?

Nuestras relaciones con Argelia son muy complejas porque España no es totalmente libre, no es totalmente soberana, es dependiente energéticamente de Argelia y Argelia tiene un arma muy potente contra España que es la presión migratoria, que es el arma de la extorsión en definitiva. Junto con Marruecos, que también tiene una relación muy complicada con Argelia, formamos un triángulo en el que el único que no está defendiendo sus intereses es España. Quizá no los está defendiendo porque, como no ha defendido su soberanía, no puede proteger sus intereses. Por su parte Marruecos tiene una pretensión de expansión territorial con respecto a España, la teoría del partido de Hassan II defiende que Ceuta y Melilla deben ser parte del ‘gran Marruecos’, ese supuesto Estado que tiene que estar formado por Mauritania, Argelia, el Sáhara, Ceuta, Melilla y hasta por Canarias. Ellos dicen públicamente que tienen esas intenciones y nosotros no nos estamos defendiendo públicamente, al contrario, estamos mostrando debilidades diplomáticas como el giro político que hemos visto con la cuestión del Sáhara, que es uno de los elementos probatorios de esto.

– El Gobierno prepara una regularización masiva de inmigrantes ilegales para 2023. ¿Por qué será malo para España?

El problema más grave al que se enfrenta España es que la inmigración sea masiva, esto es lo que permite que se pueda imponer culturalmente. Hay muchos ejemplos en España en los que vemos que esto ha ocurrido: Campohermoso, Níjar, Las Norias, El Ejido…en la zona de la que yo vengo esto lo veo constantemente. Cuando la inmigración es masiva, se impone. La regularización masiva que quiere el Gobierno ya se ha hecho en el pasado, el PP en su día regularizó 600.000 personas. Las sociedades de origen están en peligro porque están siendo desestabilizadas por esta decisión política. La inmigración masiva ha sido una decisión política coordinada con poderes financieros. Hay un beneficio económico en torno al fenómeno de la inmigración masiva que está relacionado con el trabajo y el invierno demográfico al que está sometido Occidente. Los puestos de baja cualificación pueden ser cubiertos por «semiesclavos». En la ordenación económica de un país hay dos opciones: dignificar empleos menos cualificados y luchar contra la precariedad, o importar mano de obra barata que cubra esos puestos de baja cualificación lo que, evidentemente, va a bajar los salarios. ¿La manera de este Gobierno, y de los anteriores, de luchar contra la pobreza en España es traer a siete millones de africanos sin recursos? ¿De verdad piensan que esto no va a ser en perjuicio de los españoles, que no va a empobrecerlos? Esto es una cuestión evidente que también está siendo ocultada.

– ¿Por que, excepto VOX, el resto de partidos que dicen que no son de izquierdas se han rendido a la idea de que la inmigración es la única solución a una España envejecida?

Porque lo necesitan. Hay una serie de políticos en Europa que están obedeciendo a terceros, que son los verdaderos interesados y beneficiados de la inmigración masiva. Por un lado, hay una gran infraestructura de las administraciones públicas, todo el dinero que destinamos a las políticas migratorias, que es escandaloso y es un dinero que no estamos destinando a la mejora de las condiciones de nuestros ciudadanos. Y, por otro lado, el beneficio que obtienen las ONG que tienen el negocio de traer pateras, cayucos y con el que alimentan a las mafias del norte de África. En definitiva, es un gran conglomerado del que dependen los partidos que han gobernado hasta ahora y del que son sumisos los partidos que llamamos de izquierda. Estos intereses económicos tienen en la izquierda a su mejor aliado, que es la que quiere la destrucción de las naciones, las comunidades y las familias.

– ¿Cómo se explica que Sánchez, que siempre ha mantenido una política de ‘Open Arms’, se refiriese a los peligros de la inmigración ilegal durante la Cumbre de la OTAN?

Se explica porque desde VOX, desde La Gaceta de la Iberosfera, desde la Fundación Disenso, desde el sindicato Solidaridad… desde muchísimos entes se está impulsando un cambio del relato y, de alguna manera, esto es una muestra de que ese relato está llegando a los ciudadanos, que se está constatando en las calles, y quizá ya no es tan disimulable.

– ¿Cuándo veremos al Ejército defender la Frontera Sur de Europa?

Esperemos que cuanto antes, sobre todo para que no sea irreversible la muerte de Europa, para que todavía quede algo que construir. El Ejército nace con la vocación de defender las comunidades, ¿qué mejor manera de hacerlo que proteger la puerta de entrada a esas comunidades? Hemos visto al Ejército en misiones internacionales pero muy pocas veces defendiendo nuestros intereses así que, ojalá que sea cuanto antes.

– Muchos creen que Europa ahora solo mira hacia la frontera este. Si tuviese quince segundos para dirigirse al Parlamento Europeo, ¿qué les diría?

Que abran los ojos, o que por lo menos no se los tapen a los ciudadanos europeos. Que les permitan ser libres y proteger sus comunidades.

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