El presidente de la Conferencia Episcopal Española (CEE), Ricardo Blázquez, que concluye este martes su mandato al frente de la institución, ha advertido a los obispos que mañana elegirán a su sustituto que las elecciones no son «un reparto de poder», sino una ocasión para mostrar disponibilidad al servicio.

En su último discurso como presidente de la CEE durante la inauguración de la Asamblea Plenaria que mañana elegirá a su sucesor, Blázquez ha subrayado que las elecciones no son un reparto del poder, sino una distribución de las colaboraciones para contribuir al sentido mismo de la Conferencia Episcopal y a la misión que ha recibido en su constitución.

«Las elecciones no son oportunidad de acumular prestigio, sino ocasión para mostrar disponibilidad al servicio», ha destacado el presidente de la CEE, quien se ha despedido del cargo dando las gracias por la confianza depositada en él durante estos últimos 6 años y deseando llevar adelante «solidariamente» las tareas encomendadas.