El País, que boicotea la natalidad, dice que haría falta que llegasen unos 5,5 millones de inmigrantes para asegurar el futuro de las pensiones.
«El futuro de las pensiones exige millones de nuevos inmigrantes». Este fue el titular de apertura del diario globalista El País este sábado, que ilustró la portada con la imagen de un inmigrante en Lavapiés enfrentándose a la Policía tras la muerte natural de un mantero el pasado jueves.
Un titular y una foto en la misma portada pero en dos noticias diferentes. TODO DICHO. Quien sostenga eso es enemigo de los españoles, sobre todo de los más humildes, como muchos vecinos de Lavapiés. pic.twitter.com/v79TAoYb0b
— Santiago Abascal (@Santi_ABASCAL) 16 de marzo de 2018
Asegura El País que el Fondo Monetario Internacional (FMI) «ha esbozado un camino para reformar el sistema y ha elaborado unas proyecciones con todas las variables que condicionan las cuentas de la Seguridad Social: el número de jubilados que se prevé, el de trabajadores, la inmigración, las contribuciones o la generosidad con los pensionistas». Según esto «haría falta que llegasen unos 5,5 millones de inmigrantes, un 12% de la población actual y una proporción similar a la que se recibió entre 2000 y 2007″.
Mientras el diario llama abiertamente a la inmigración, boicotea la natalidad. En un artículo publicado en julio del pasado año -y enmarcado dentro de una campaña mediática que también tuvo su hueco en el británico The Guardian, que el día anterior abogó por fomentar políticas contrarias a la natalidad entre los jóvenes del Reino Unido- llamó a hacerse vegetariano, deja el coche y tener menos hijos «para luchar contra el cambio climático».
Mientras los líderes islamistas llaman a aumentar la natalidad –¿recuerdan al presidente turco Recep Tayyip Erdogan pidiendo a sus hermanos y hermanas musulmanes en Europa tener cinco hijos?- las tasas de natalidad europeas son insuficientes para asegurar la reposición de la población y constituyen un problema en sí mismo. En Francia, por ejemplo, la tasa de natalidad es de 1,8 hijos por familia, lejos de los 2,1 necesarios para asegurar la supervivencia. En el Reino Unido está en 1,6; en Grecia, Italia y Alemania, en 1,3; y en España, 1,1.
En medio de esta crisis, cabe señalar la ausencia de ayudas a la maternidad, la consagración del aborto como un derecho -en nuestro país hubo 100.000 abortos el pasado año- y la ya mencionada promoción de la inmigración.
En nuestro país, el primer semestre de 2017 -último dato oficial- continuó con la tendencia registrada en los dos últimos años de menos nacimientos y más defunciones. Entre enero y junio nacieron 187.703 personas -un 6,3 % menos que en el mismo período del año anterior- y murieron 219.835 -un 4,5 % más-, según el Instituto Nacional de Estadística (INE). Estos datos confirmaron el saldo negativo en el crecimiento de la población -establecido en 32.132 personas menos-. La cifra es más desfavorable que la del mismo período de 2016, en el que la diferencia entre nacimientos y muertes fue negativa en 10.145 personas.
