Piden a Carmena que quite la tasa para ver el Belén municipal. La acusan de intentar «desterrar la Navidad de las calles de Madrid» y de pretender «hacer negocio con la ilusión de miles de niños».
La alcaldesa de Madrid, la podemita Manuela Carmena ha dado a entender que no atenderá las firmas que le reclaman que se ponga el Belén en la Puerta de Alcalá.
En Change.org más de 30.000 personas han apoyado una petición, dirigida al Ayuntamiento, para que se recupere «el significado tradicional de la Navidad, algo que en la capital se asocia con el Nacimiento de la Puerta de Alcalá».
La petición también acusa a la marca de Podemos de haber convertido las Navidades en «las fiestas de unos pocos: los que se empeñan en negar y reescribir la realidad histórica y tradicional de estas celebraciones».
Por su parte, el PP ha reivindicado este domingo que la podemita vuelva a colocar el Nacimiento en la emblemática Puerta de Alcalá con la puesta de un Belén de cartón, y junto a él, varios vecinos, que reivindican el significado de «tradición» que tiene el Belén, han colocado otros más pequeños.
Con @dtosalamancapp y muchos concejales, diputados y amigos poniendo El Belén que Carmena no quiere poner. pic.twitter.com/oktocR0yI2
— J L Martinez Almeida (@jlmanavasques) 3 de diciembre de 2017
#Navidad con #Belen
🔴No vamos a tolerar que en la capital de España el populismo desprecie las tradiciones de la inmensa mayoría.
@ppmadrid pic.twitter.com/TkjRLfmHif— Rosalia Gonzalo (@RosaliaGonzalo) 3 de diciembre de 2017
Al acto asistieron, entre otros, el portavoz de los populares en el Ayuntamiento de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, la consejera de Transportes de la Comunidad, Rosalía Gonzalo, y el presidente del PP en el distrito de Salamanca, Jorge Rodrigo.
Para el portavoz popular, el Ayuntamiento de Manuela Carmena trata de «ocultar todos los símbolos cristianos propios de la Navidad». «Queremos reivindicar nuestras raíces culturales y religiosas», ha explicado.
«A nosotros nos parece muy bien que Manuela Carmena colabore entusiásticamente en la celebración del Ramadán o del Año Nuevo chino, pero eso no puede suponer despreciar las mejores tradiciones que tenemos en Madrid y en España», ha señalado Martínez-Almeida.
Por su parte, Jorge Rodrigo, presidente del PP en el distrito de Salamanca, ha indicado que lo que quieren es que «no secuestren» el Belén. Con esta iniciativa pretenden que los vecinos acudan a la Puerta de Alcalá ha colocar más nacimientos.
Además, el Centro Jurídico Tomás Moro (CJTM) ha reclamado a Carmena que no cobre tasa por visitar el belén de Cibeles. La entrada en taquilla para ver el Nacimiento de Cibeles es gratis, pero aquellos que reservan un pase por Internet deben pagar 0,5 euros.
Este centro jurídico ha lanzado un comunicado en el que carga contra el gobierno municipal. «Con la Navidad no se negocia», trasladan a Carmena. Destaca que «la actitud del Ayuntamiento de Madrid no es respetuosa ni con nuestra historia, ni con nuestras tradiciones» y acusa al gobierno municipal de intentar «desterrar la Navidad de las calles de Madrid» y de pretender «hacer negocio con la ilusión de miles de niños».
Los inventores como eje central de la programación
Carmena ha presentado este lunes la programación de Navidad, para la que el Ayuntamiento ha destinado un presupuesto de 1.750.000 euros, de los que 800.000 irán destinados a la Cabalgata de Reyes. En total, se realizarán 800 actos.
La podemita ha reconocido que la Navidad tiene origen religioso, pero ha señalado que a la vez es «una fiesta de solidaridad, de humanidad». Ha explicado que la cabalgata y el resto de actos tendrán como eje central «los inventos y los inventores».
Carmena ha detallado que uno de los puntos de partida es el poder de la imaginación y la creatividad que permite crear cosas que no existen, por lo que se hará un homenaje a los inventos y a los inventores, como Leonardo Da Vinci, Marie Curie o Albert Einstein.
Cabe recordar que en las primeras navidades de Camena como alcaldesa, la podemita dejó de patrocinar los belenes; que ante la presión ciudadana decidió mantener el del Ayuntamiento, pero uno de reducidas dimensiones, y cambió el tradicional Nacimiento de la Puerta de Alcalá por adornos «laicos». Y esto no es todo. También destrozó la cabalgata de Reyes e impidió participar a un colegio católico en la de Carabanchel.
El año pasado, copió a la alcaldesa de Barcelona, la también podemita Ada Colau, y paganizó la Navidad. Una de las novedades era la celebración el 21 de diciembre del soslticio de invierno, un evento con un transfondo pagano, que su colega Ada Colau también festeja.
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