La negativa del extesorero de UGT en Andalucía Francisco Fresneda a declarar en el Senado ha convertido la sesión de la Comisión de Investigación de la Financiación de los Partidos en algo más de media hora de monólogo del portavoz del PP, Luis Aznar, sobre la trama andaluza de los ERE.
Fresneda, investigado por un juzgado de Sevilla por la gestión de las sedes del sindicato y las subvenciones que recibía de la Junta de Andalucía, ha acudido a la Cámara Alta acompañado de su abogado y ha anunciado que se acogía a su derecho a no responder a las preguntas que le pretendía formular el portavoz del grupo popular.
Se ha limitado a confirmar que fue tesorero de UGT Andalucía durante 15 años y que está imputado judicialmente, y ha mantenido un mutismo absoluto pese a los intentos del senador Aznar por lograr que hablara de más cosas, hasta el punto de invocar varias veces su «gallardía» para invitarle a reconocer los hechos y pedir disculpas.
Eso sí, al final de la sesión Fresneda ha contestado a una pregunta, pero sólo para negar que milite en el PSOE.
De esta manera, la sesión se ha transformado en un monólogo del portavoz del PP, que ha detallado el «entramado delictivo» montado según él por UGT en Andalucía para beneficiarse de las subvenciones de la Junta y también para financiar de forma «irregular» e «ilegal» al PSOE, con el que compartían sedes y también trabajadores.
En este ámbito, Luis Aznar ha hecho especial hincapié en la contratación, por parte del sindicato, de José María Moriche, marido de la presidenta andaluza, Susana Díaz, como «coordinador» de los cursos de formación impartidos por UGT subvencionados por la Junta, «sin ser docente» ni haber acreditado su preparación.
El portavoz se ha mostrado muy sorprendido porque, en una de sus pocas respuestas, el tesorero le ha manifestado que no sabía quién es esta persona, pese a tener «notoriedad pública y social».
Así, ante el silencio del compareciente, visiblemente incómodo ante una comisión en la que sólo participan senadores del PP por la ausencia deliberada de los demás grupos, Luis Aznar ha ido desgranando las «herramientas» que según la investigación judicial tenía UGT para gestionar «ingresos millonarios de subvenciones millonarias» procedentes de la Junta.
Un «entramado delictivo» que según ha apuntado se organizó «en comandita» con un PSOE también beneficiado, gestionado durante años con «absoluta impunidad» y sin que «nadie» desde la Junta diera la voz de alarma, por lo que el senador ha anunciado al término de la sesión que su grupo está pensando en tomar medidas al respecto.
En concreto, ha sugerido la posibilidad de enviar datos a la Fiscalía ante la aparición de «datos constatados y pruebas» de la falta de reacción desde las instituciones ante estas actuaciones.
La comparecencia del extesorero ha sido la única de la jornada, ya que no ha acudido el propietario de la empresa Fitonovo, Rafael González Palomo, investigado igualmente por los vínculos empresariales de UGT en Andalucía.
La presidenta de la comisión, Rosa Vindel, ha explicado que su ausencia se ha debido a un error del empresario y será convocado otro día.
El grupo popular pretende combinar sus indagaciones sobre la trama de los ERE, centradas en cómo afecta a una posible financiación irregular del PSOE andaluz, con la investigación del caso de las finanzas del PSPV y el Bloc, para la cual ya han sido convocados responsables de ambas formaciones.
