El ex secretario de Organización del PSOE, Santos Cerdán, ha reconocido ante el Tribunal Supremo prácticas que generan sospechas de malversación de fondos públicos. Durante su comparecencia del pasado lunes ante el magistrado del Supremo Leopoldo Puente, Cerdán ha negado haberse lucrado personalmente con contratos públicos. Sin embargo, ha admitido que el Gobierno socialista utilizó dinero estatal y fondos europeos para promover proyectos con claros fines electorales en beneficio del PSOE.
Entre las obras mencionadas por Cerdán se encuentran al menos cuatro infraestructuras públicas, valoradas en conjunto en cerca de 400 millones de euros, investigadas por la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil. Todas fueron anunciadas por el Ejecutivo antes de las elecciones de 2019, y una de ellas se reactivó en 2020 para intentar mantener la alcaldía en manos socialistas.
Uno de los proyectos más relevantes es el de la integración ferroviaria en Sant Feliu de Llobregat (Barcelona), adjudicado a Acciona. Inicialmente presupuestado en 51,7 millones, acabó costando 62 millones, y posteriormente el Gobierno cifró la inversión total en 110 millones. Según el testimonio de Cerdán, la decisión de impulsar esta obra respondía a la necesidad de mostrar apoyo a Cataluña antes de las elecciones municipales de mayo de 2019.
Otra obra clave fue la del Puente del Centenario en Sevilla. Cerdán ha reconocido que su insistencia en este proyecto obedecía al objetivo de mantener la ciudad bajo control socialista. El ministro de Transportes, José Luis Ábalos, declaró de emergencia una primera intervención en junio de 2019, con un coste de 13 millones, que un año más tarde se amplió a una inversión de 102,8 millones adjudicada también a Acciona. A pesar de los esfuerzos, el PSOE perdió la alcaldía en las siguientes elecciones.