Agentes de la Policía Nacional de Las Palmas de Gran Canaria han detenido a siete inmigrantes ilegales de origen marroquí, cinco de ellos como presuntos autores de un delito de robo con violencia y dos por homicidio en grado de tentativa tras protagonizar una pelea que terminó con un herido de gravedad.
La pelea se inició en la zona de Santa Catalina tras el robo de un smartwatch a uno de los implicados. Un testigo observó cómo varios individuos se agredían mutuamente con botellas de cristal. Fruto de los cortes, uno de los involucrados tuvo que ser trasladado hasta un centro médico cercano en shock hipovolémico por varios cortes muy profundos en el cuello.
Los hechos se remontan a la madrugada del sábado 13 de mayo, cuando un testigo realizó una llamada al teléfono 091 en la que alertaba de una fuerte reyerta entre varios individuos. Tras la llamada, desde la Comisaría de Las Palmas se activó un dispositivo de urgencia para esclarecer la pelea. Una patrulla comprobó la presencia de sangre en el suelo.
Otro indicativo de la Policía Nacional localizó a dos individuos con restos de sangre en sus ropas,¡. Ambos reconocieron que habían sido víctimas de un robo por parte de cinco hombres y que se defendieron usando botellas de cristal rotas.
Los cinco primeros, con edades comprendidas entre 23 y 30 años, fueron detenidos como presuntos autores de un delito de robo con violencia, mientras que los otros dos (víctimas del robo), de 19 y 22 años, fueron detenidos por homicidio en grado de tentativa.
Según las fuentes policiales, los detenidos —de nacionalidad marroquí— habían llegado recientemente en patera al archipiélago canario, por lo que se encontraban ilegalmente en territorio español. Han pasado a disposición judicial y el juez ha decretado su ingreso en prisión provisional.
