Una juez ha decretado la vuelta con su familia de una pequeña cristiana acogida por una familia fundamentalista musulmana.
La pequeña de cinco años de edad ha sido llevada con su abuela, tal y como había solicitado sus parientes desde hacía meses, y apartada de la familia de acogida que le habían impuesto las autoridades del municipio londinense de Tower Hamlets.
Cuenta el Times que la niña estuvo bajo el cuidado de dos familias musulmanas en apenas seis meses. El cambio fue radical para una pequeña criada bajo las costumbres y tradiciones cristianas. Al llegar a sus nuevos hogares se encontró con mujeres con la cara completamente cubierta, ya que sus nuevos ‘familiares’ eran practicantes de la rama más fundamentalista del islam -salafismo-, y con la prohibición de comer cerdo.
Según explica el diario, la primera familia incluso le quitó el collar con la cruz cristiana que vestía su cuello. Otro de los problemas que se encontró la niña fue el idioma, ya que en las casas solo se hablaba árabe, incluso cuando se dirigían a ella.
Los trabajadores sociales hicieron constar el sufrimiento que estaba pasando la menor y explicaron que a menudo presentaba un semblante triste y los ojos llorosos. Según explica el Daily Mail, amigos de la familia de la niña han explicado que su idioma es el inglés, su pasaporte es británico y que fue bautizada en la fe cristiana. Sin embargo, durante una visita de su madre biológica la pequeña le espetó que ‘’la Navidad y Semana Santa son estúpidas’’ y que ‘’las mujeres europeas son estúpidas y alcohólicas’’.
Estas expresiones fueron las que llevaron finalmente a los familiares a pedir a las autoridades que la sacasen de ahí.
La juez del municipio, donde dos tercios de la población pertenece a minorías étnicas, ha decretado que la pequeña sea devuelta a su abuela, quien puede atender sus necesidades ‘’en términos étnicos, culturales y religiosos’’. Ha ordenado a su vez la apertura de una investigación sobre el caso, que ha conmocionado a la sociedad británica.
Dirigiéndose al abogado del municipio de Tower Hamlets durante la audiencia que ha tenido lugar este miércoles, la juez Khatun Sapnara -de confesión musulmana- esgrimió que su ‘’principal preocupación es el bienestar de la niña’’.
‘’Aceptará que la prioridad debería ser un lugar apropiado y culturalmente compatible que reúna las necesidades de la menor en términos étnicos, culturales y religiosos’’, le espetó la juez.
La autoridad municipal ha apuntado a que en el momento en el que la pequeña fue dada en acogida no había familias británicas disponibles para ello. La madre biológica podrá seguir visitando a su hija, cuya estancia con su abuela tiene se limita hasta que se resuelva su situación, siempre en presencia de trabajadores sociales.
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