Todo indica que los políticos catalanes presos por el intento de golpe de Estado del 1-O volverán a Cataluña la próxima semana.
Pedro Sánchez continúa lanzando guiños al separatismo catalán. Aunque el nuevo presidente de la Generalitat, Quim Torra, parece dispuesto a llevar el procés hasta las últimas consecuencias, el socialista ha preguntado al juez Pablo Llarena si tiene previstas más diligencias sobre los líderes del ‘procés’ en prisión.
Se trata del primer paso para lograr que los presos catalanes sean acercados a cárceles en la comunidad autónoma. Con toda probabilidad, Llarena contestará que no, pues parece que tras la última comparecencia del exconsejero Joaquim Forn ha dado por cerradas las diligencias.
Según El País, Sánchez prometió que iniciaría esos trámites una vez concluida la fase de instrucción. A partir del trámite activado por Interior, se elaborará un informe para comprobar que estos nueve presos tienen vinculación familiar en Cataluña.
Si todo va según lo previsto por Sánchez, los presos serán trasladado a cárceles catalanas en pocas semanas. Conviene recordar que esta medida fue una de las grandes exigencias de los partidos independentistas en el Congreso de los Diputados durante la moción de censura.
La decisión del destino de los presos estará en manos de la Generalitat una vez concluido el plazo administrativo, pues la comunidad autónoma tiene transferidas las competencias penitenciarias.
Esos presos son el exvicepresident catalán Oriol Junqueras, los exconsellers Joaquim Forn, Jordi Turull, Josep Rull, Raül Romeva y Dolors Bassa; la expresidenta del Parlament Carme Forcadell; el diputado y expresidente de ANC, Jordi Sànchez, y el presidente de Ómnium Cultural, Jordi Cuixart.
‘Es decisión de Interior’
Por su parte, Llarena ha contestado al escrito remitido por Instituciones Penitenciarias que la decisión de trasladar a cuatro presos preventivos, entre ellos los «Jordis», corresponde al Ministerio del Interior.
Ahora, en una providencia Llarena responde que no existe «razón procesal que conduzca a la custodia de los procesados en ningún centro penitenciario concreto, estando la decisión sujeta a los criterios penitenciarios que la Secretaría General de Instituciones Penitenciarias considere de aplicación.»
Presiones a Sánchez
La consellera de Presidencia y portavoz del Govern, Elsa Artadi, ha afirmado que espera que Sánchez no esté pretendiendo que los catalanes que fueron a votar «se olviden» del 1-O, ni que tampoco esté pidiendo que «abandonen el derecho a la autodeterminación».
Artadi ha respondido así a las declaraciones de Sánchez, quien ha trasladado al presidente de la Generalitat, Quim Torra, que lo que representó el 1 de octubre «es una página que hay que pasar», pero se ha mostrado dispuesto a dialogar con él siempre dentro de los márgenes de la Constitución.
Todo ello después de que Torra dijera ayer que el soberanismo catalán debe «crear otro 1 de octubre», es decir, propiciar «otro momento» que represente una «oportunidad» para «hacer efectiva la república» catalana que no se implementó el pasado otoño.
Artadi ha aclarado que el presidente catalán no se refería a otro referéndum organizado por la Generalitat, sino que habrá otros «momentos claves» o «ventanas de oportunidad» en el futuro para avanzar en el proyecto de la república.
