El Gobierno ha rechazado revelar detalles sobre la agenda de Begoña Gómez, esposa del presidente Pedro Sánchez, durante la próxima cumbre del G-20 en Brasil, un evento al que acudirá junto a su marido. Gómez, quien está siendo investigada por varios delitos en un juzgado de Madrid, debía comparecer el próximo lunes en los juzgados de Plaza de Castilla, pero ha notificado su ausencia alegando su participación en el viaje oficial.
El abogado de Gómez, Antonio Camacho, presentó un escrito al juez instructor, Juan Carlos Peinado, indicando que su clienta no podría asistir debido a la invitación oficial de la Presidencia de Brasil para asistir a la cumbre. «A través del presente escrito ponemos en conocimiento del juzgado la imposibilidad de que mi representada pueda asistir el citado día, puesto que se encontrará de visita oficial en la República Federativa de Brasil a los efectos de asistir a la Cumbre Mundial del G-20″, detalla el documento adelantado por Vozpópuli.
El procedimiento judicial al que se enfrenta Gómez incluye nuevas imputaciones relacionadas con el uso gratuito de un software por parte de varias empresas para la Universidad Complutense de Madrid, lo que ha llevado al juez a citarla en tres ocasiones. Hasta ahora, esta excusa de viaje oficial no se había utilizado, marcando un precedente en casos que involucran a la esposa de un presidente del Gobierno.
Fuentes del Ejecutivo han explicado que «la agenda de Begoña Gómez la lleva la organización que es quien invita a los acompañantes de los líderes», y que cualquier actividad propia, como ocurrió en la India, estaría vinculada a la programación del evento. Sin embargo, los actos concretos en los que participará Gómez no han sido detallados.
El viaje de la pareja presidencial se realizará el próximo domingo a bordo de un avión oficial del Ejército del Aire y del Espacio. La cumbre se extenderá entre el lunes y el martes, pero Pedro Sánchez no asistirá a la sesión de control al Gobierno del miércoles, aunque ya estará de regreso en España, acumulando casi un mes sin comparecer ante la oposición.
La falta de transparencia sobre la agenda de Gómez en Brasil y su ausencia en la citación judicial han generado dudas sobre su papel en este viaje, en un contexto en el que su situación legal sigue siendo objeto de atención pública.