Este miércoles la Unidad Central Operativa de la Guardia Civil detuvo a Koldo García Izaguirre, mano derecha del exministro de Transportes José Luis Ábalos y hombre fuerte de Ferraz durante los últimos años. Según la investigación de la UCO, Koldo cobró comisiones ilegales por la adjudicación de contratos relativos a la compra de mascarillas quirúrgicas durante la pandemia.
Durante la mañana del jueves, sin embargo, el asesor de mayor confianza de Ábalos, actual diputado del PSOE, ha sido puesto en libertad. No sólo él, sino también los otros tres detenidos relacionados con las mordidas ilegales durante los peores meses de la pandemia, que dejo cientos de miles de muertos. Precisamente este jueves los implicados han testificado en la Audiencia Nacional y el magistrado los ha dejado en libertad con medidas preventivas.
A los cuatro detenidos —Koldo, su hermano, Víctor de Aldama e Íñigo Rotaetxe— se les acusa de delitos de operación criminal, tráfico de influencias y cohecho. Pero no sólo a ellos. Durante la operación de la Guardia Civil también fueron detenidos la mujer de Koldo, Patricia Uritz Iriarte, el citado Víctor de Aldama, actual presidente del Zamora Club de Fútbol y otros 17 implicados por supuestas adjudicaciones fraudulentas en contratos de mascarillas.
Ahora el cerco se estrecha sobre José Luis Ábalos, hombre de máxima confianza de Pedro Sánchez, y también sobre Santos Cerdán, actual secretario de Organización del PSOE y líder en la sombra de los socialistas. Precisamente este último ha explicado que no tenía «ninguna sospecha» sobre Koldo García: «Estamos sorprendidos por la noticia», ha llegado a decir.
