El PNV ya aborda en sus reuniones la posibilidad de unas nuevas elecciones generales en otoño. El alto grado de incertidumbre política en Cataluña y su influencia en las Cortes Generales tiene al Gobierno de Pedro Sánchez en vilo. El PSOE confía en una victoria holgada de Salvador Illa, pero la gobernabilidad en la región parece imposible y todo apunta a una repetición electoral. Y esa inestabilidad política alcanzaría a todo el país, como recordó Carles Puigdemont este martes.
Según publica El Confidencial, los nacionalistas vascos son los primeros en trabajar ya con esta hipótesis. Aunque no creen que en la comunidad vasca afecte lo que suceda en las elecciones catalanas, sí valoran todas las opciones, con especial atención al posible adelanto electoral.
Por otro lado, la situación para el PNV podría no ser fácil tampoco tras las vascas, independientemente de unas posibles nuevas elecciones. Todas las encuestas muestran a Bildu como el ganador de los próximos comicios en la región. Aunque la vicepresidenta primera y ministra de Hacienda, María Jesús Montero, aseguraba este mismos miércoles que el PSOE no apoyaría un Gobierno de Bildu.
«Siempre hemos sido muy claros en este sentido y siempre hemos dicho que no vamos a apoyar ningún gobierno de Bildu. Lo sabe esta formación política», decía. Algo que podría crear en la comunidad una situación ingobernable similar a la de Cataluña, al ser imposible contentar a los dos socios del PSOE a la vez. Además, Montero mostraba su apoyo al líder del PSOE vasco y candidato a lehendakari, Eneko Andueza. El CIS augura un sorpasso de Bildu en votos al PNV, con el 35,1% de los votos frente al 33,5% de la formación liderada por Imanol Pradales.
