«La Cruz del Valle de Cuelgamuros fue levantada por el trabajo esclavo de los presos políticos de la dictadura franquista. Hay que dinamitar la Cruz del Valle de Cuelgamuros. Es algo evidente». Este ha sido el mensaje en la red social X del secretario de Organización y portavoz de Podemos, Pablo Fernández.
Hace unos años Podemos presentó el documento ‘Exhumar el franquismo. Recuperemos el Valle de Cuelgamuros para la democracia’ en el que pedía demoler la cruz «para reconvertir el Valle de los Caídos en un espacio para la memoria democrática» y la «desacralización» del espacio.
El exdiputado de la formación Ramón Espinar llamó hace unas semanas en el programa ‘En boca de todos’ de Cuatro a volar la cruz del conjunto monumental donde los monjes benedictinos rezan por las almas de los caídos de ambos bandos. La declaración llegó en un momento en el que el Gobierno de Pedro Sánchez apela al «revanchismo» guerracivilista.
Cabe señalar que el Ejecutivo destinará casi 20,4 millones de euros a la conmemoración de la muerte de Francisco Franco hace cincuenta años. El presupuesto se divide en dos grandes bloques: 12,3 millones se utilizarán para financiar más de un centenar de eventos que se prolongarán hasta diciembre y más de 8 millones será para «acciones publicitarias».
El Pleno del Congreso rechazó en noviembre, con la abstención del PP, la enmienda de totalidad planteada por VOX a la reforma de la ley de asociaciones impulsada por el PSOE para poder disolver asociaciones que disientan de la «verdad oficial».
VOX pretendía que, en lugar de esa norma, la Cámara aceptara otra para derogar la nueva ley de memoria histórica, pero su iniciativa no contó con el apoyo de ningún otro grupo.
