El PSOE de la provincia de Badajoz ha presentado este viernes una denuncia ante la Fiscalía del Tribunal Superior de Justicia de Extremadura contra las declaraciones realizadas por el senador autonómico de VOX y diputado en la Asamblea de Extremadura, Ángel Pelayo Gordillo, el pasado 18 de octubre, sobre la acogida de inmigrantes ilegales en Mérida. Además, ha afirmado que «los señores de VOX son los actuales socios de Gobierno del Partido Popular en Extremadura y los socios de Feijoo en España, unos políticos a quienes solo les falta ya ponerse un capirote blanco para asemejarse con el Ku Klux Klan, en esa peligrosa cruzada que están haciendo contra los inmigrantes acogidos en nuestra región».
Una denuncia que, como ha avanzado el secretario general del PSOE en la provincia de Badajoz, Rafael Lemus, se basa en dichas declaraciones que hizo el senador autonómico y también portavoz de VOX en la Asamblea «asimilando la inmigración con un riesgo para la seguridad y riesgo de atentados terroristas, con referencia a lo ocurrido en Bruselas, en Francia y en Cataluña».
Así lo ha señalado en una rueda de prensa en la sede del partido en la capital pacense, donde ha precisado que la denuncia ha sido presentada en la mañana de este viernes y que lo han realizado de manera telemática, así como que han necesitado una serie de días para argumentarla «bien», dado que al ir al Tribunal Superior de Justicia entienden que la misma «tiene que conllevar cierto rigor», sobre todo, ha dicho, porque entienden y creen que esa denuncia «puede llegar a buen puerto».
En su intervención, Lemus ha hecho hincapié en que, «además de una irresponsabilidad política», esas declaraciones «conllevan una enorme gravedad al constituir un ataque a las personas migrantes por cuestiones de raza, religión y nación», como también creen los socialistas que estas declaraciones «tienden a generar en la población extremeña un sentimiento de rechazo, hostilidad y discriminación».
Acto seguido, ha señalado que «mientras esta peligrosa cruzada racista» se produce en Extremadura, la presidenta de la Junta, María Guardiola, este pasado jueves ha tenido la oportunidad de ir a «un examen oral» a Madrid ante el líder del PP, Alberto Núñez Feijoo, «para rendir cuentas» sobre los acuerdos de gobierno y «sobre todo» acerca de la coalición de gobierno con VOX.
En su opinión, «Feijoo le dio un aprobado raspado, porque es verdad que está manteniendo el gobierno a duras penas», tras lo que ha apuntillado como «resumen» de lo que está aconteciendo en Extremadura con la gestión de Guardiola que, en menos de 120 días, «ya han cesado dos altísimos cargos de la Junta».
Por un lado, ha recordado, «cesó, dimitió según lo vistan unos, lo vistan otros», la que fuera consejera de VOX, la titular de Gestión Forestal y Mundo Rural, Camino Limia, y «hace tan solo dos días cesó», «eso sí» de una manera «inaudita» para la región y para las administraciones de la comunidad, Francisco Eugenio Pozo Pitel como secretario general de la Consejería de Educación, Ciencia y Formación Profesional con una argumentación «muy manida por el Partido Popular pero desconocida en la Junta de Extremadura, un cese en diferido».
En este sentido, ha continuado, desde el gobierno regional han argumentado que cesaron a Pozo Pitel «porque tenía que hacer unos cursos», «algo que no solamente es inaudito sino que incluso es esperpéntico» y que «denota sobre todo la falta de seriedad y de rigor dentro de la Junta de Extremadura».
«Con esta Junta de Extremadura, con esta coalición entre el Partido Popular y VOX, los socialistas extremeños entendemos que solamente hay una alternativa en este país ante las dificultades que están poniendo en el camino del progreso de nuestra región y de nuestro país», ha concluido, para referirse a la coalición a nivel nacional de PSOE y Sumar.
